Tropas se retiran de la frontera el 15 de diciembre
Soldados de EEUU siguen colocando alambradas en la garita internacional en la frontera con México
Unos 2,000 migrantes llegaron a Querétaro, el resto de la caravana ya salió de la capital de México
QUERÉTARO. Después de horas de camino, miles de centroamericanos arribaron ayer en caravana al central estado de Querétaro, tras abandonar al alba la capital de México, decididos a alcanzar su destino final en Estados Unidos, pese al furioso rechazo del presidente Donald Trump. Unas 10 horas después de dejar Ciudad de México, alrededor de dos mil migrantes ya habían logrado llegar a Querétaro, un próspero estado caracterizado por su alto desarrollo industrial, donde las autoridades locales dispusieron que se alojaran en los pasillos exteriores del estadio de fútbol La Corregidora, sin acceso a las gradas ni a la cancha. Se espera que otros tres mil que también reanudaron su marcha desde un albergue al oriente de Ciudad de México, viajando primero en vagones de metro (habilitados especialmente por la alcaldía de la capital) y luego en carros e incluso a pie, lleguen a Querétaro en las próximas horas. Con cobijas y plásticos, los migrantes improvisan refugios para frenar las fuertes corrientes de aire frío que afectan a aquellos que sufren enfermedades respiratorias. Algunos de ellos, sobre todo niños, presentan fiebre. Otros se duchan como pueden en los baños del estadio; mientras la mayoría, exhausta, intenta descansar sobre las colchonetas que carga ron todo el camino. Para hacer el viaje hubo que caminar un buen tramo y“tomamos una utobúsqu en osco- bróunos 100pesos( unos cinco dólares)” por 150 km, dijo a la Héctor Torres, un padre de familia hondureño. “La verdad, se están aprovechando los transportistas y taxistas de nosotros los inmigrantes que venimos estirados, o sea, sin dinero. Esto es una denuncia”, subrayó.
Frontera. Autoridades de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza y del Departamento de Defensa informaron que hasta mediados de diciembre permanecerán las tropas en la frontera entre California y México, como parte del operativo Línea Segura. Bajo este dispositivo se “monitorea” el recorrido de la multitudinaria avanzada que partió de Honduras hacia Estados Unidos. Las posibilidades de que pudieran darse disturbios han preparado con anticipación al Gobierno para “cualquier contingencia”, dijo Pete Flores, director de operaciones terrestres de CBP en San Diego. Se ha solicitado el apoyo de cinco mil soldados en la frontera, incluyendo 1,300 que desde esta semana se instalaron entre San Diego (California) y Tijuana (México). Jeffrey S. Buchanan, teniente general de la Armada, subrayó quesetratadeun operativo temporal de asistencia, yqueenestecaso la tarea de hacer cumplir la ley recae en CBP y en Patrulla Fronteriza. Entre otras funciones brindarán apoyo médico, una policía militarizada para proteger a los propios soldados y un equipo aéreo que ayude a que oficiales tengan mejor movilidad en la frontera, agregó el militar, quien dijo permanecerán en el sitio hasta el 15 de diciembre.
Largo periplo La primera caravana partió el 13 de octubre desde San Pedro Sula y ha recorrido más de 1,500 kilómetros. Orden El presidente Donald Trump limitó las opciones para los solicitantes de asilo en la frontera con México.