Exsocio de “El Chapo” testifica en su contra en Nueva York
Jesús “El Rey” Zambada subió ayer al estrado como testigo de la Fiscalía, su comparecencia continuará hoy También atestiguó un exagente de aduanas y un excolaborador de la DEA
NUEVA YORK. “El Chapo” Guzmán era uno de los mayores jefes del cartel de Sinaloa, aseguró ayer en su juicio en Nueva York un testigo clave del gobierno que fue aliado del capo mexicano, al revelar secretos del lucrativo tráfico de cocaína desde Colombia a EEUU. Jesús “El Rey” Zambada dijo que el Chapo era “el principal” líder del cartel de Sinaloa junto a su hermano Ismael “El Mayo” Zambada, co-fundador de esa organización criminal, a quien la defensa del Chapo señala como el verdadero jefe. Contador y empleado por el cartel durante dos décadas hasta su arresto en 2008, “El Rey” está en custodia de EEUU. Durante varias horas relató al jurado el sofisticado funcionamiento del cartel de Sin a lo a, incluida s sus“inversiones de capital” en Colombia, que hacían en pequeños grupos y a medias con los colombianos. El Chapo y sus socios llenaron el vacío que dejó la aprobación final de la extradición en Colombia en 1997. Fue entonces que los narcos colombianos comenzaron a tercerizar su negocio para llegar a EEUU. “El principal al lado” del Mayo Zambada “era el Chapo”, dijo “El Rey” al jurado. El primer testigo del gobierno del segundo día de juicio fue Carlos Salazar, un agente de aduanas retirado que descubrió en mayo de 1990 un túnel atribuido al Chapo para trasladar drogas entre Agua Prieta, en México, y Douglas, en Arizona, donde el gobierno estadounidense incautó más de 929 kilos de cocaína. Le siguió el testimonio de un químico forense retirado que trabajó para la DEA, que certificó la pureza de esa cocaína en 99%. Jeffrey Lichtman, abogado del Chapo, calificó de “degenerados” y “mentirosos” a los exsocios o rivales del Chapo que cooperan con el gobierno. Regaño. El segundo día del juicio comenzó con el pedido de la fiscalía para que el juez Brian Cogan desestime las declaraciones del abogado Lichtman en sus argumentos iniciales del martes. El juez se opuso a esa medida tan tajante, pero advirtió a Lichtman que los supuestos sobornos recibidos por el actual presidente de México, Enrique Peña Nieto y su antecesor Felipe Calderón por parte del socio del Chapo, Ismael “Mayo” Zambada, son irrelevantes “si no están vinculados al acusado”. La defensa del Chapo asegura que éste, hambriento de notoriedad, fue víctima de un “montaje” del gobierno mexicano y agentes de la DEA, y que el verdadero jefe del cartel de Sinaloa siempre fue Zambada. Cogan también aclaró al jurado que los argumentos iniciales de ambas partes no son evidencia, y que a la hora de decidir su veredicto deben determinar si el acusado es culpable más allá de toda duda razonable. La estrategia recuerda a la que
en Nueva York. Si es hallado culpable por uno solo podría ser condenado a cadena perpetua.
Lichtman siguió en el caso por el que se hizo famoso, el del mafioso neoyorquino John A. Gotti. El letrado no negó entonces que su cliente hubiera pertenecido a la mafia, pero aseguró que hacía tiempo que la había dejado, atacando la teoría central de la fiscalía. El juicio acabó siendo declarado nulo y Gotti se salvó de ir a la cárcel porque la fiscalía tiró la toalla a la hora de buscar un nuevo proceso.