Argentina recibe cumbre del G20 en plena crisis económica
Buenos Aires recibirá la visita de Donald Trump, Vladimir Putin, Angela Merkel, Theresa May, Xi Jinping y el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman, entre otros líderes del mundo
BUENOS AIRES. La cumbre del G20 que se celebra en Buenos Aires será el evento internacional más importante que haya organizado este país, pero, contrariamente a lo que esperaba el presidente Mauricio Macri, una Argentina en plena crisis económica recibirá a los líderes mundiales. Macri, un dirigente de centro-derecha con una exitosa carrera como empresario, ha tenido en 2018 el año más difícil de su gobierno, con el estallido de una crisis económica que lo empujó a pedir un auxilio al Fondo Monetario Internacional por unos 56,000 millones de dólares, el más elevado en la historia del organismo. Depreciación de 50% del peso argentino frente al dólar, inflación proyectada entre 45% y 50% para el cierre de 2018, aumento de la pobreza (que se sitúa en 27,3%) y del desempleo (9,6%), contracción económica prevista de 2,6% para 2018 y 1,6% en 2019 ... no son los indicadores que deseaba mostrar el anfitrión ante gobernantes como el estadounidense Donald Trump o la alemana Angela Merkel. Macri asumió en diciembre de 2015 con un discurso liberal, tras 12 años de gobierno proteccionista de la centroizquierda peronista de Néstor y Cristinia Kirchner (2003-2015), cuando se produjo un boom en los precios de los cereales, producto de exportación por excelencia de Argentina. Macri abrió el mercado de cambios, eliminó subsidios a los servicios básicos y emprendió recortes en la administración pública, según un plan gradual que buscaba aliviar el impacto en la población y mantener su respaldo. Sin embargo, en 2018 los ingresos por exportaciones sufrieron una dura caída, tras una de las peores sequías en el campo, mientras EEUU endurecía sus medidas proteccionistas y se enfrascaba en una guerra comercial con China.
Protestas anunciadas. Una corrida cambiaria a fines de abril hizo estallar la crisis que con dificultades intenta contener Macri, cuyo nivel de desaprobación llegó a 65% en el lapso septiembre-octubre, según la encuesta de opinión pública de la Universidad de San Andrés. La política económica de su gobierno es lo que más rechaza la población, con un índice de 86% de insatisfechos, de acuerdo con ese mismo sondeo. El deterioro de la situación económica azuza la conflictividad social, con dos huelgas generales este año e innumerables paros y marchas sectoriales. Esta semana en que se celebra la cumbre del G20, los sindicatos hacen huelgas parciales en aeropuertos, en la compañía Aerolíneas Argentinas y en el servicio de metro en demanda de ajustes salariales acordes con la inflación. Además, organizaciones sociales preparan una serie de movilizaciones en repudio a la cumbre del G20 y en contra de la política económica de Macri que incluyen charlas, talleres, conciertos y una gran manifestación programada para mañana. “El G20 va a durar un día, al segundo día se van todos por el quilombo (desastre) que se va a armar. La gente tiene hambre y ¿quieren hacer un G20 acá?”, vaticina Jesús Olgin, vendedor callejero en el centro de Buenos Aires.
Las autoridades estiman la participación en la cumbre de unas 15,000 personas, de las cuales 3,000 son periodistas