Niño muere por falta de ambulancia
Padres lo llevaron al Hospital del Sur, debió ser trasladado a la capital, pero no había conductor
CHOLUTECA. La vida o la muerte de un infante de seis años dependió ayer de la existencia de un suero antiofídico y, más grave aún, de la disponibilidad de un motorista, según versiones de sus familiares. Ocurrió en el Hospital Regional del Sur, de Choluteca. Elvin Martínez Oviedo, un niño de seis años que fue llevado por sus padres en busca de ayuda médica a este sanatorio, lamentablemente expiró 12 horas después de haber sido ingresado al no recibir la atención requerida. El menor fue mordido por una mortal serpiente coral cuando salió al patio de su casa junto a su progenitor en la aldea Tierra Blanca, del municipio de Namasigüe.
Cómo pasó. “Salimos a hacer del cuerpo (necesidades fisiológicas) como a las seis de la tarde y él se agachó para recoger una lata y fue cuando el animal le mordió la mano”, narró en medio del llanto don Elvin Martínez, padre del malogrado niño. La culebra le asestó una mordida en el dedo de en medio de la mano izquierda al pequeño Elvin. Mientras su padre hacía sus necesidades, el menor gritó del dolor y don Elvin corrió rápidamente para auxiliarlo. “Lo trajimos a las siete de la noche al hospital, pero me lo atendieron hasta pasados 40 minutos, cuando ya vieron que el niño se me estaba muriendo le pusieron ( suministraron) oxígeno”, relató don Elvin.
Sobrepasó el tiempo. Según los expertos en serpientes, la mordida del coral no provoca hinchazón en la zona afectada y los demás síntomas pueden no manifestarse hasta pasadas doce horas. Precisamente a las 6:00 am de ayer viernes se cumplían las 12 horas desde que el infante fue mordido en su dedo. Alrededor de las 7:30 am, Elvin Martínez Oviedo sucumbió por no habérsele aplicado el suero antiofídico que combatiera la neurotoxina del veneno de la serpiente coral. Los padres del menor mani- festaron que su hijo no fue trasladado a la capital (donde sí estaba el medicamento) porque no había un conductor que manejara la única ambulancia del hospital. Se intentó comunicarse con la directora del Hospital Regional del Sur, María Antonieta Castro, y el subdirector, Gustavo Avelar, pero no contestaron los celulares a los cuales se les llamó en varias ocasiones.