Posibles salidas a la crisis chilena
Además de las demandas por salud y educación, cada día gana fuerza la petición de una nueva Constitución
Santiago.cuandolasprotestas en Chile pierden algo de poder de convocatoria y ganan en violencia, se perfilan como posiblessalidasalacrisisunllamado a plebiscito, una nueva Constitución, la implementación de un proceso de diálogo ciudadano o, los más escépticos, apostar al desgaste del movimiento. Para la mayoría de los partidos de oposición, la opción más viable y rápida es llamar a un plebiscito para que una nueva Constitución reemplace la que se mantiene como herencia de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). Para muchos esa Constitución promovió la desconexión con la ciudadanía que hizo estallar la crisis. Creadaendictadurayaprobada en1980enunplebiscitosobreel cual siempre hubo dudas, una nueva carta fundamental es vista como una especie de nuevo punto fundacional sobre el cual establecer un nuevo orden social, más igualitario en Chile, unodelospaísesmásdesiguales de la región.
Para los partidos de gobierno, en cambio, los esfuerzos deben concentrarse en “satisfacer las demandas prioritarias, que son pensiones, medicamentos ysueldomínimo”,segúncomentójacquelinevanrysselberghe, presidenta de la Unión Demócrata Independiente (UDI). Algunos más escépticos, sin embargo, creen que el gobierno apostaría por dilatar la entrega de respuesta, a la espera de desgastar y disolver al movimiento social, que sin tener hasta ahora interlocutores ha dado varias muestras de poder.