“Estamos vivos y en nuestro templo le daremos vuelta”
El técnico de Motagua confía en darle vuelta a la serie en su casa y destacó que el apoyo de la afición será determinante para salir campeón
TEGUCIGALPA. Alegres y con mucho optimismo se mostraron los jugadores del Motagua ayer a su arribo a la capital luego de la derrota 1-0 frente al Saprissa por la final de ida de la Liga de Concacaf.
El estratega argentino, Diego Vázquez, espera darle vuelta al marcador y coronarse en su casa el próximo martes 26 de noviembre en el Nacional. “Buscamos ganar el partido, tuvimos la opción de Emilio (Izaguirre), la de Marco Vega que saca el arquero. Lo que pasa es que era poco el tiempo cuando ellos se quedaron con nueve jugadores. Pero bueno, si nosotros creamos oportunidades de gol allá, imagínate aquí con el Nacional lleno, lo que vamos generar y estoy seguro e ilusionado con eso, dijo el timonel. Pese a la derrota, el técnico del bicampeón de Honduras espera el apoyo de la afición porque considera que será vital para la remontada. “Estamos bien aquí en el Nacional, es nuestro templo sagrado y tiene que explotar de gente, necesitamos que lo colmen para que ese jugador número 12, que es tan importante, nos apoyen y poder darles esa alegría final”, indicó.
Diego argumentó que el equipo está con buen ánimo para el partido de vuelta.
“Eso nos da el ánimo que aquí con nuestra gente y con todo el apoyo y obviamente con argumentos futbolísticos podemos darle vuelta y tener el éxito final, lo ideal era ganar, pero estamos vivos y en nuestro templo le daremos vuelta a la serie”, comentó.
Además, el técnico de las águilas destacó el desempeño de su equipo en una cancha complicada.
“Estuvimos bastante ordenados, ellos técnicamente son muy buenos, solo cometimos un error y ellos, salvo la parada de Jonathan (Rougier) al finalizar el juego, no nos crearon mayor peligro, pero no sufrimos demasiado”, argumentó.
El juego de vuelta de la final de la Liga de Concacaf se jugará el 26 de noviembre a las 9:00 pm en donde los azules tendrán que ganar por una diferencia de dos goles si quieren ser campeones.