Conozca la ciudad de Quebec, Canadá:
un sueño en tonos ocres
CANADÁ. Visitar este destino es equiparable a sumergirse en un cuento fantástico. Este municipio de Quebec posee un parque nacional que alberga a la que en sus orígenes se conocía como Montaña de los Espíritus y un resort con aire europeo.
Ya sea para esquiar en invierno, mirar el bello follaje de otoño o sumergirte en el lago en verano, se perfila como uno de los destinos que estarán cada vez más en boga, considera Alexandre Caron, director de ventas. “Ofrecemos una experiencia de montaña todo el año. Somos el parque de juegos de la gente de Montreal porque estamos a 90 minutos en auto o está nuestro aeropuerto (con vuelos nacionales), que es más sexi que los habituales: una casa de madera casi familiar”. Caminar entre las calles peatonales del resort lo transporta a una villa europea con casitas de colores, pasillos enigmáticos y todo tipo de alternativas para comer, beber, hacer shopping y realizar variedad de actividades. Acceder a las tendencias de moda de marcas locales, probar el tradicional poutine o unas palomitas con maple, diseñar su propia camiseta como souvenir o llevar a los niños al eurobungee son solo algunas de las actividades accesibles en la villa. Pero, sobre todo, está el atractivo ecológico: un lago al que se puede llegar caminando, un parque nacional protegido y una montaña en cuya cima se logran las fotos más bellas y, según la temporada, se practica senderismo o esquí en 102 pistas.
Al subir a la montaña se aprecia la belleza a distancia: en otoño, por ejemplo, dominan los colores rojo, ocre, verde y demás tonos de los arces, abedules, abetos y otras especies de árboles. Asimismo, está la opción de lanzarse a la tirolesa, cuenta Monique Richard-lópez, encargada de mercadotecnia de Ziptrek Ecotours.