El bebé prematuro, posibles problemas de salud y cuidados
Conoce los factores de riesgo y las complicaciones asociadas a la prematuridad, así como buenos consejos
REDACCIÓN. La Organización Mundial de la Salud denomina pretérmino a todo recién nacido vivo con menos de 37 semanas de gestación (un embarazo normal dura 40 semanas). Antes la prematuridad se definía como un peso al nacimiento de 2.500 gr o menos. Sin embargo, en la actualidad estos niños se conocen como “recién nacidos de bajo peso al nacimiento”, y se consideran prematuros si han tenido una gestación más corta, un crecimiento intrauterino menor del esperado, o ambas cosas. Tanto la prematuridad como el crecimiento intrauterino retrasado (CIR) se asocian a mayor morbilidad y mortalidad neonatales.
Los embarazos múltiples suelen ocasionar el nacimiento prematuro de los bebés, y representan un porcentaje significativo del total de partos prematuros, aunque existen otros factores de riesgo, como las complicaciones durante el embarazo, la falta de cuidados prenatales, o la edad, entre otros, que influyen para que el nacimiento se produzca cuando los órganos del bebé no están completamente desarrollados.
Aunque los problemas de salud asociados a la prematuridad pueden ser numerosos para el bebé, con los cuidados adecuados al nacer y al llegar a casa podremos mejorar sus expectativas de desarrollo. No se recomienda que reciba muchas visitas ni permitir que se fume en la habitación del bebé. Además, debe recibir luz natural, tener el dormitorio ventilado diariamente y mantener una temperatura agradable, en torno a los 20 grados centígrados.
Expertos aconsejan conocer sobre higiene, alimentación, vacunas o pautas de sueño para cuando el bebé esté en casa.