Argentina y su deuda externa
"Las negociaciones con el FMI se ven complicadas por Las elecciones parlamentarias de noviembre, en Momentos en que el gobierno se ve desgastado por La crisis económica"
Apenas nueve meses después de haber cerrado una reestructuración de 66,000 millones de dólares de deuda con bonistas en el exterior, Argentina se enfrenta de nuevo a vencimientos acuciantes de sus acreencias, ahora con el Club de París y con el Fondo Monetario Internacional.
Hoy lunes, Argentina debe cancelar unos 2,500 millones de dólares al Club de París, aunque tendrá 60 días de gracia para concretar el pago sin caer en default. Se trata del último tramo de una deuda que se había renegociado en 2014. “Es el vencimiento más relevante del año. Es difícil que el Gobierno llegue a un acuerdo y probablemente se utilice el período de gracia para seguir negociando”, consideró el economista Joaquín Waldman, de la consultora Ecolatina.
En busca de un alivio, el presidente de centroizquierda Alberto Fernández cumplió hace dos semanas una gira por portugal, españa, francia e Italia, en la que obtuvo declaraciones de respaldo de sus gobernantes a sus negociaciones por alivian ar la carga del pasivo.
También fue recibido por su compatriota el papa Francisco y pudo reunirse en Roma por primera vez en persona con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva. Esta semana tuvo una entrevista virtual con la canciller alemana, Ángela Merkel. El desafío ahora es transformar esas declaraciones en actos concretos que eviten la caída de Argentina en un nuevo impago.
“Se busca una reestructuración de la deuda sin las penalidades que tiene el contrato. Pero eso requiere, si no un nuevo acuerdo con el FMI, al menos ‘algo’ con el FMI”, explicó la economista Marina Dal Poggeto, de la firma Ecogo.
Ala sumirla presidencia en diciembre de 2019, Fernández renunció a los tramos pendientes del crédito que había suscrito Argentina durante el Gobierno de su antecesor Mauricio Macri por unos 57,000 millones de dólares. De ese monto, Argentina alcanzó a recibir unos 44,000 millones. En reemplazo de ese programa, el Gobierno ha planteado suscribir un acuerdo de facilidades extendidas. Fernández ha enfatizado que su Gobierno hará todos los esfuerzos para no incurrir en cesación de pagos, un fantasma que persigue a este país.
Luego de su gira, ha querido mostrarse optimista. “Hay un vencimiento con el Club de París que creo vamos a poder prorrogar en obligación del pago. hablé con( el presidente francés em manuel) Macron y cómo estamos en caminando las conversaciones con el Fondo. Lo vamos a lograr”, declaró el mandatario hace pocos días a CNN.
Hasta ahora, Argentina ha cumplido con los pagos alf mi :300 millones de dólares en intereses en febrero y otros 300 millones en mayo. este año le quedan pendientes intereses por 350 millones de dólares en agosto y 400 millones en noviembre. Además hay vencimientos de capital por 1,900 millones de dólares en septiembre y 1,900 millones más en diciembre.
- Elecciones -
Pero las negociaciones con el FMI se ven complicadas por las elecciones parlamentarias de medio término que se celebrarán en noviembre, en momentos en que el Gobierno se ve desgastado por la crisis económica, con la pobreza y la inflación al alza, y el país se halla en el peor momento del apande mi ad elcovid-19,p orla que han muerto más de 76,000 personas. “Un acuerdo de facilidades extendidas incluye definiciones que, ami juicio, no se van a poder tomare n plena campaña electoral ”, refirió DalPogg et o .“Creo que fue un error garrafal que no haya habido transición entre los Gobiernos en 2019, que se haya caído el programa con elf mi y no se haya intentado resolverlorápido. creo que fue otro error gr avísimo no haber negociado con el Fondo antes de reestructurar la deuda privada”, dijo la economista.
Además de los cerca de 5,000 millones de dólares que deben pagarse este año al FMI, Argentina tendrá vencimientos por casi 40,000 millones de dólares entre 2022 y 2023, una cifra inabordable para este país que atraviesa su tercer año de recesión y se encuentra excluido del mercado de capitales.