Artritis reumatoide está afectando a los adultos jóvenes
Cambiar el estilo de vida es fundamental para evitar enfermedades como la artritis reumatoide
REDACCIÓN. Los comerciales que muestran a personas de la tercera edad como los principales afectados por la artritis reumatoide están algo alejados de la realidad, afirma el reumatólogo Bernardo Martínez.
“La edad en la que con mayor frecuencia se presenta la enfermedad es la tercera y la cuarta década de la vida, es decir, entre los 20 y los 40 años”, señala. “Los pacientes me describen lo que sienten con términos tan comunes como ‘me siento de la patada’, o me dicen ‘no puedo vivir así porque (el malestar) no me deja hacer nada’.
Molestias. Los expertos ahora saben que dicho malestar es crónico, es decir, es controlado, pero no curado, afirma el médico. También conocen que afecta especialmente las articulaciones de las manos, aunque no están exentas las demás, como la cadera, las rodillas, los hombros y los codos.
“Y al ser una enfermedad de personas jóvenes, el tener un diag
Los componentes genéticos incambiables que dan a nóstico oportuno nos permite mantenerlos funcionalmente mejor, o que sean funcionales a la hora de llevar sus actividades durante el mayor tiempo de vida”, agrega. Todos estos son datos importantes para tomar conciencia de lo que la población puede hacer hoy para reducir los factores de riesgo asociados con la enfermedad, así como detectar rápidamente los signos que deben llevar a buscar una cita con el experto. De estas decisiones, afirma Martínez, puede depender la calidad de vida de una persona con artritis reumatoide.
Signos y tratamiento. Las personas
Los modificables, en cambio, están más no desarrollan artritis reumatoide de la noche a la mañana, expresa el experto. Los signos aparecen poco a poco. “Los síntomas más importantes son dolor que se siente en las articulaciones: se empiezan a hinchar, las personas empiezan a notar que amanecen rígidas. Situaciones tan habituales como abrir un frasco, abrir la puerta o la llave del agua ya no pueden ser hechas, y eso lleva a hacer la cita con el doctor. “Y aquí quiero enfatizar la importancia del diagnóstico y tratamiento temprano porque la enfermedad va destruyendo al hueso, cuyo daño es irreversible.