Tite, la voz de la experiencia; Scaloni, sediento de gloria
Los brasileños quieren lograr el bicampeonato y los gauchos pretenden terminar con la sequía de títulos después que se les han escapado cuatro finales
RÍO DE JANEIRO, BRASIL. Consagrado, sereno y con una hoja de ruta que incluye a varios grandes de Brasil, Tite pondrá a prueba su sabiduría el sábado ante un Lionel Scaloni que se saltó varias etapas y hace camino al andar al frente de una renovada, pero ‘Messidependiente’ Argentina. Adenor Leonardo Bacchi, Tite, dirigirá a sus 60 años su segunda final de Copa América consecutiva en busca de asegurarle a Brasil su décimo trofeo continental. En la esquina opuesta, Scaloni a sus 43 busca romper el maleficio de la Albiceleste y darle a una afición al borde del ataque de nervios el primer título en 28 años.
Amante del fútbol moderno y las transiciones rápidas, el timonel argentino apuesta al vértigo y al talento del “mejor jugador de todos los tiempos”, como define a un Lionel Messi que recuperó la sonrisa en la Albiceleste
de la mano del DT. Enfrente, el archirrival celebra a un entrenador con un historial digno de un seleccionador de la ‘Canarinha’, que incluye el título de la Copa Libertadores y el Mundial de Clubes con Corinthians en 2012. En campo, Tite presenta a un Brasil equilibrado en mediocampo, fuerte en defensa y libre en ataque para que Neymar y jóvenes figuras como Lucas Paquetá recuerden a la ‘torcida’ algo del ‘jogo bonito’ que consagró Pelé.
El sábado, ambos técnicos jugarán la revancha de la semifinal que terminó con triunfo de Brasil en la Copa América del 2019.
“TENEMOS GANAS DE GANAR ESTE PARTIDO, Y EL HAMBRE DE ESTOS JUGADORES ES EVIDENTE”
LIONEL SCALONI DT de Argentina
“LAS FINALES NO SE JUEGAN, SE GANAN. CON MEDIO A CERO NOSOTROS SOMOS LOS CAMPEONES, ESO ES LO MÁS IMPORTANTE”
CASEMIRO Volante de Brasil
Gestor del recambio albiceleste. Sin experiencia como entrenador de mayores, Scaloni pasó de dirigir a la Sub-20 y ser ayudante de Jorge Sampaoli en la absoluta a tomar las riendas cuando todo era caos y la continuidad de Messi estaba en duda. “El activo más grande que tiene el gestor del grupo, él armó al grupo. Detectó cosas que utilizó en su ciclo, como evitar las turbulencias y generar el recambio generacional que no era fácil y en su faceta seleccionador lo hizo muy bien”, comentó a la AFP, Sebastián Varela del Río, director de Enganche de Argentina.
Jugadores como De Paul, Lo Celso y Lautaro Martínez ganaron terreno y otros veteranos como Angel Di María mantuvieron su ascendencia en el grupo, amparados por la Pulga Messi, la respuesta a casi todos los problemas de este equipo.
“Es un gran seleccionador, es un entrenador en crecimiento y que le gusta un fútbol dinámico en transiciones y en eso está creciendo al calor de su ciclo”, agregó el periodista.