Gobierno cubano saca músculo con “revolución” tras protestas
A una semana de las masivas manifestaciones, el escuadrón de “boinas negras” se toma las calles de la isla Guaidó acusa a Maduro de financiar “la persecución” en La Habana
LA HABANA. Como en los tiempos de Fidel Castro, el Gobierno de Cuba regresó este fin de semana a los actos masivos de “reafirmación revolucionaria” para rechazar una ofensiva en su contra en redes sociales y cerrar el paso a protestas como las ocurridas hace siete días. “¡Abajo los Yankees!”, “¡Nacimos para vencer y no para ser vencidos!”, gritaba la multitud, congregada en el Malecón de La Habana y apoyando al presidente: “Pa’ lo que sea, Canel, pa’ lo que sea”.
Se trata de los primeros actos públicos en respuesta a las inéditas protestas que sacudieron el domingo y lunes decenas de ciudades cubanas, dejaron un muerto, decenas de heridos y más de un centenar de detenidos, mostrando importantes fisuras sociales.
Miles de personas con banderas nacionales y del 26 de julio (Movimiento de Fidel Castro para la revolución) respondieron a la convocatoria en La Habana y amanecieron junto con el presidente Miguel Díaz-canel y al líder jubilado Raúl Castro, vestido con su uniforme de general. En tanto, la Policía y los militares vigilan exhaustivamente las calles de Cuba, especialmente en la ciudad de San Antonio de los Baños, donde se originó todo. Los accesos a esta localidad, ubicada a 30 kilómetros de La Habana, se encontraban en su mayoría cortados o custodiados por agentes de seguridad. Camiones llenos de soldados y decenas de policías mantienen resguardada la plaza central del pueblo junto con militares y agentes del Departamento de la Seguridad, etiquetado por opositores como la “Policía política cubana”.
Por su parte, el líder opositor venezolano Juan Guaidó acusó al gobierno de Nicolás Maduro de financiar la “represión y la persecución” en Cuba, después de que la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, se reuniera con el presidente de la isla caribeña, Miguel Díazcanel.