¿APRENDEREMOS?

A través de muchos años hemos señalado los errores que se suelen cometer en Honduras porque los que toman las decisiones consideran muchas funciones al alcance de cualquier cerebro. El fútbol no es la excepción. En condiciones normales volar es sencillo, pero hay ciertos destinos en los que se debe tomar precauciones, sobre todo cuando no se viaja de vacaciones. Nos ha tocado estar dentro de aviones tres horas después de haber embarcado y nos han bajado argumentando diferentes razones por las que nos obligan a regresar a la sala de espera. ¿Por qué no tenían reservado hotel en Miami?, ¿cuántos durmieron en la sala del aeropuerto?, ¿qué problema daba dormir una noche a la ida y una noche a la vuelta viajando en la ruta más corta vía Panamá que les recomendamos hace un mes?

Les decíamos en televisión que Curazao tuvo un poco de mala suerte cuando perdió de local ante Honduras y que nos preocupaba el hecho que nuestros futbolistas no están acostumbrados a jugar cada tres días. Imagínese usted lo que significó el partido en San Pedro Sula sin entrenamientos, sin haber dormido y batiendo récord de primera selección catracha que juega un partido oficial bajándose el mismo día del avión después que su rival visitante cumplía 48 horas de estar en el país. Siempre que vamos al Caribe lo hacemos en vuelos chárter, ¿por qué no le hicieron esta vez? No es más caro, es más cómodo, se obtiene el descanso de los futbolistas, se ahorra hotel, etc. ¿Para qué dieron una conferencia de prensa 4 horas antes del partido? Si el técnico Diego Vázquez cambió 5 futbolistas al término de los primeros 45 minutos fue porque casi todo el equipo titular pidió ser sustituido. Cuándo no descansas, tu mente dice disparates y tu físico no responde y no te sientes pleno.

No hay que echarse a morir por lo sucedido, era obvio que Concacaf no podría postergar el partido porque anoche Curazao visitó al grande de la triangular que es Canadá. Después de los dos juegos queda claro que hoy no estamos en un nivel superior a Curazao y que el ranking de la FIFA que los sitúa delante de nosotros responde a la realidad.