Redes sociales y sus afectos en el cerebro de los jóvenes
Estudios indican que revisar con frecuencia las redes sociales tiene repercusiones en el desarrollo de los niños y adolescentes
REDACCIÓN. El impacto de las redes sociales en los jóvenes es un tema candente, ya que la mayoría de los niños y adolescentes hacen lo que sus amigos hacen, y a los padres les preocupa fijar unos límites. Un nuevo estudio examina si revisar de forma frecuente los sitios de redes sociales (Facebook, Instagram y Snapchat) se asocia con cambios en el desarrollo funcional del cerebro en esos adolescentes jóvenes, de alrededor de 12 años. Los investigadores, de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, usaron unos escáneres cerebrales llamados imágenes de resonancia magnética funcional (IRMF ), y encontraron que actualizar y revisar las redes sociales de forma habitual podría asociarse con cambios en la sensibilidad del cerebro a las recompensas y los castigos sociales, por ejemplo esos “me gusta” y la implicación con los demás en línea.
“La adolescencia es un periodo dramático de desarrollo del cerebro, en particular en estas regiones cerebrales que responden a las recompensas sociales”, señaló la autora del estudio, Eva Telzer, profesora asociada de psicología y neurociencia.
Estudio. Durante tres años, el equipo de Telzer reclutó a 169 estudiantes de sexto y séptimo cursos de tres escuelas públicas intermedias de la parte rural de Carolina del Norte. Los participantes eran de distintas razas, e incluían a chicos y chicas que reportaron con qué frecuencia revisaban las tres plataformas de redes sociales, con una variación de menos de una vez a más de 20 veces al día. Los participantes que revisaban las redes sociales hasta 15 veces al día cuando tenían 12 años mostraron “diferencias en la forma en que sus cerebros se desarrollaban en los tres años siguientes”, dijo Telzer. “Y es en las áreas específicas del cerebro que detectan la prominencia del ambiente, en respuesta a esas recompensas sociales”. La prominencia se refiere a cuáles elementos atraen más a las personas y en los que enfocarán su atención. Los adolescentes que crecen mientras revisan las redes sociales de manera constante se están volviendo hipersensibles a la retroalimentación paritaria. Podría conducir potencialmente a que el cerebro se haga cada vez más sensible a la retroalimentación social, y esto podría continuar en la adultez. Podría conducir potencialmente a que el cerebro se haga cada vez más sensible a la retroalimentación social, y esto podría continuar en la adultez.