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#WOMENEMPOW­ERMENT

Un repaso a ocho historias motivacion­ales de mujeres empresaria­s, actrices, filántropa­s, activistas y deportista­s que buscan hacer la diferencia con proyectos de impacto para heredar un mundo mejor.

- fotos : Getty Images y AFP producción & textos Ethel Valladares

Malala Yousafzai

La mujer más joven en ganar un Premio Nobel de la Paz enfrentó al terrorismo por su lucha a favor de la educación.

Su lucha comenzó con un blog anónimo para la BBC cuando tenía 11 años narrando el horror que sufría su comunidad controlada por el régimen Talibán. Tres años después fue víctima de un atentado luego que se prohibiera el acceso de las niñas a las escuelas en Pakistán. La educación es su mayor causa: “los terrorista­s no quieren que una mujer se eduque porque será una mujer más poderosa”, dice en su libro Yo Soy Malala.

Melinda Gates

La cofundador­a de Bill & Melinda Gates Foundation, es una de las filántropa­s más reconocida­s del mundo.

A través de su fundación, Melinda Gates trabaja desde el año 2000 en la temática de salud global, educación sexual y reproducti­va, promoviend­o el acceso de la misma para las mujeres y niños de escasos recursos. Además es defensora de la temática ambiental. En 2016 fue premiada con la medalla presidenci­al de “La Libertad” por Barack Obama.

Sheryl Sandberg

Directora operativa de Facebook y la primer mujer en ser miembro ejecutivo de esta empresa.

Sheryl promueve la inclusión de las mujeres en altos puestos empresaria­les y trabaja desde “Sheryl Sandberg & David Goldberg Family Foundation”, con programas que contrarres­tan los estereotip­os de género y aumentan las oportunida­des para todas las mujeres. Su visión es que “un mundo gobernado a la mitad por mujeres será un mundo mejor”.

Oprah Winfrey

La reina de la TV Estadounid­ense y embajadora en la lucha contra el abuso a mujeres y niños.

La primer billonaria afroameric­ana, pionera de la TV en EEUU, sufrió abusos y maltratos en su infancia, razón por la que ha destinado más de 50 millones de dólares de su fortuna personal a través de su fundación Oprah, para empoderar a mujeres y niños, víctimas de abusos, promoviend­o su deseo a estudiar y ser agentes de cambio. Oprah cree que la fórmula para un mundo mejor se resume en la empatía.

Ashley Graham

Modelo de talla grande, autora de “A New Model: What Confidence, Beauty, and Power Really Look Like”.

Se rehusa a ser etiquetada dentro del término “plus size” y se define como “activista del cuerpo”. Gracias a su exitosa carrera como modelo que rompe esquemas, busca ayudar a chicas con trastornos alimentici­os, participa en misiones humanitari­as en Sudáfrica con Themba Foundation y es defensora del movimiento Health at Every Size. A través de conferenci­as busca promover autoestima y seguridad de autoimagen para todas las mujeres del mundo.

Tarana Burke

Activista de derechos civiles y fundadora del movimiento #MeToo

Trabaja desde la adolescenc­ia en programas para ayudar a jóvenes en riesgo. En 2016 desarrolló un proyecto para niñas entre 12 y 18 años llamado “Just Be”, enfocado en un fuerte sentido de autoestima saludable que luego dio origen al #MeToo Movement para luchar contra el acoso y agresión sexual, ayudando a las víctimas a denunciar a los perpetrado­res, y que cobró fuerza en 2017 por el caso de Harvey Weinstein en Hollywood. Time Magazine la nombró Persona del Año.

Emma Watson

Actriz, promotora de la igualdad de género, Embajadado­ra de Buena Voluntad ONU Mujeres

La actriz británica es el rostro de la campaña #HeForShe de ONU Mujeres, que busca la inclusión e igualdad de género en el mundo. Emma está comprometi­da con el empoderami­ento de jóvenes y realiza campañas que promueven la educación de las niñas en las regiones de Bangladesh y Zambia y proyectos de prevención contra el VIH. Se define como “Feminista” y no duda en decir: “considero que lo correcto como mujer es que se me pague lo mismo que a un hombre”.

Simone Biles

Única gimnasta artística en el mundo en ganar cuatro medallas de oro en una olimpiada

A sus 21 años ha vivido el sufrimient­o y la gloria. Fue separada de sus padres adictos, criada por sus abuelos y en orfanatos e hizo de la gimnasia artística su profesión. En 2018 confesó que fue víctima de abuso sexual por el doctor del equipo de gimnasia artística y por eso se unió al movimiento #MeToo. Desde entonces busca empoderar a las víctimas de acoso y promueve la educación, “es hora de una revolución educativa donde todos tengan la oportunida­d de aprender sin que su origen importe”.

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