PLÁCIDO DOMINGO
Con su incomparable voz ha conquistado escenarios icónicos como La Scala de Milán, el Met de Nueva York, la Staatsoper de Viena o el Covent Garden de Londres. Él es parte de la realeza de la ópera y aunque su legado e historia se ha escrito con letras dor
Se ha ganado a pulso su título. José Plácido Domingo Embil, el famoso director, compositor, tenor y barítono español que ha cantado en diversos idiomas es considerado uno de los mejores tenores de la historia. Tiene un don y lo ha sabido utilizar: su poderosa voz , la misma que le ha brindado la oportunidad de actuar en los teatros de ópera más prestigiosos del mundo. Nació en Madrid el 21 de enero de 1941 en el seno de una familia de artistas de la zarzuela y operetas. A los 8 años se mudó a México con sus padres Plácido Francisco Domingo Ferrer, Josefa “Pepita’’ Embi lE chánizy su hermana María Jo sé. Posterior mente tomó clases de piano y conducción y comenzó a ganar dinero con sus presentaciones en bares y tomando pequeños roles en televisión.
Siendo aún un adolescente se inscribió en el Conservatorio Nacional de Música en la Ciudad de México y a los 18 años obtuvo una pequeña oportunidad de participar en una producción de Ópera Nacional. Dio su primera actuación como tenor interpretando a Alfredo en La Tra vi ata en Monterrey. Papel que se extendió por dos años. Posterior mente se unió ala Ópera Nacional de Israel y permaneció con la compañía durante tres temporadas. En 1957 se casó con su compañera de piano Ana María Guerra Cuéy de esa unión nació Jo sé Plácido Domingo Guerra. Sin embargo, su matrimonio no duró mucho y se separaron. Posterior mente, en 1962, se casó con la soprano lírica de origen mexicano Marta Ornelas con quien tuvo dos hijos: Plácido Francisco y Álvaro Maurizio. Ahora tienen ocho nietos, y no pierden la esperanza que más de alguno siga los pasos de su abuelo.
A mediados de los años 60, Plácido hizo su debut con la Ópera de Nueva York. Su carrera seguía en ascenso y ya en 1973 debutaría como director de orquesta para la producción de La Traviata. Diez años después agregó una estrella de cine a su lista de logros, apareciendo como Alfredo en la adaptación cinematográfica de esa obra a cargo de Franco Zeffirelli. Ese mismo año ganó un premio Grammy a la Mejor Grabación de Ópera. En 1984 interpretó a Don José, personaje legendario de ópera en la pantalla grande en Carmen. Meses después ganaría un Grammy a la Mejor Interpretación Pop Latino por el álbum Always in My Heart.
Luego de reunirse con Zeffirelli, el tenor apareció en Otello. En 1990, su carrera tendría un salto trascendental al cantar junto a Luciano Pavarotti y José Carreras por primera vez. La grabación de ese concierto resultó ser un gran éxito y el trío ganó el Grammy Award a la Mejor Interpretación Vocal Clásica. Cuatro años más tarde, Los Tres Tenores se presentaron nuevamente en Los Ángeles. En total cantaron
juntos en 35 conciertos memorables, ganándose el respeto y admiración de sus seguidores a nivel mundial. Tres voces únicas unidas en una temporada artística que superó cualquier expectativa y que en pleno apogeo del pop impuso un nuevo estilo de música clásica. Y es que todos los que parecían grandes hasta entonces empequeñecieron ante el fenómeno musical de estos tres artistas con insuperables voces. Además de actuar, Plácido asumió otros retos. Se convirtió en el director artístico de la Ópera NacionaldeWashingtonyposteriormentealcanzósuanhelo de ser nombrado director general de la Ópera de Los Ángeles. Agradecido con la vida y ansioso por apoyar a otros, en 1993 estableció Operalia, un concurso anual de voces para descubrir nuevos talentos.
A mediados de 2018 el maestro continuó agigantando su legado al convertirse en el primer español en dirigir una ópera en el mítico Festival de Bayreuth, que se realiza en Baviera, Alemania. Después de casi medio siglo como tenor, en 2009 opta por ser barítono apareciendo en una parte de la ópera Simon Boccanegra de Giuseppe Verdi en La Scala de Berlín. Su actuación fue todo un éxito y sus presentaciones se extendieron a Londres, Nueva York, Madrid y Viena.
A sus 77 años el genio de la zarzuela sigue dando de qué hablar en el mundo de la ópera, y no es para menos, ya que el 23 de agosto de 2018 subió al escenario en el marco del Festival de Salzburgo en Austria para interpretar Los pescadores de perlas, del compositor francés Georges Bizet, con el que alcanzó un récord histórico. Y es que hasta ahora nadie ha cantado más de los 150 roles que ha interpretado el gran Plácido Domingo. Para entender su grandeza hay que saber que el gran tenor Enrico Caruso interpretó 60, la soprano griega Maria Callas 50 y la soprano más famosa de la actualidad, Renée Fleming, lleva 55 roles. Las amenazas a su salud no han podido con su pasión por los escenarios. Aunque en 2010 se practicó una cirugía por cáncer de colon y en 2013 sufrió una embolia pulmonar, no se le cruza ni por un instante retirarse de los escenarios. Su impecable carrera incluye más de 4 mil actuaciones a lo largo de seis décadas de trayectoria, más de un centenar de álbumes grabados, 12 premios Grammy ynumerosos reconocimientos , incluida la Medalla Presidencial de la Libertad de Estados Unidos, el título de Caballero Británico Honorario, Premio Birgit Nilsson y Medalla de Honor de Omán. El trayecto ha sido largo, sus éxitos le preceden como a ninguno y su legado permanecerá indeleble en la historia de la música y la ópera. ¿Cuándo se retira el maestro ? Esa es una pregunta frecuente en sus incontables entrevistas, a lo que contesta con la franqueza que le caracteriza: “Si no canto, me oxido’’.