Foco Político: Rally electoral latinoamericano, por Daniel Zovatto
Lo que está en juego en el maratón electoral latinoamericano de 2018
Según la astrología china, Perro de Tierra regirá 2018, y todo indica que será un año intenso, turbulento y con altos niveles de incertidumbre, sobre todo en lo político.
Buenas noticias para la economía global: las proyecciones de BM hablan de un crecimiento sincronizado de 3,1%. En cambio la agenda internacional estará repleta de eventos que podrían agravar la actual “recesión geopolítica”. Destacan, la casi segura reelección de Vladimir Putin en Rusia, la urgencia de Angela Merkel de poner en marcha el nuevo gobierno en Alemania, el enigma de las elecciones italianas, el avance de las complejas negociaciones del Brexit, las crecientes amenazas nucleares de Kim Jong-un desde Corea del Norte, las tensiones entre Irán y Arabia Saudita, Estados Unidos e Israel, la evolución de los conflictos en Afganistán, Siria y Yemen, la consolidación del liderazgo mundial de Xi Jinping y de China, y un largo etcétera. Todo ello sin descartar la aparición de algún “cisne negro”. Como bien advierte el grupo EURASIA: “2018 presenta el escenario con mayores riesgos geopolíticos desde 1998”.
Por su parte, América Latina vivirá una significativa maratón electoral con seis elecciones presidenciales, que forman parte del super-ciclo electoral latinoamericano (14 elecciones presidenciales entre noviembre de 2017 y fines de 2019, dos de las cuales ya tuvieron lugar: Chile y Honduras). Inicia Costa Rica, el 4 de febrero, y debería cerrar Venezuela a fin de año (lo que todavía es incierto). Entre ambas, habrá comicios en Paraguay, el 22 de abril; Colombia, el 27 de mayo; México, el 1 de julio, y en Brasil, el 7 de octubre.
Súper ciclo electoral en Latam
De este modo, en apenas seis meses, la primera (Brasil), segunda (Mexico) y cuarta economía (Colombia) de la región renovarán sus mandatarios; simultaneidad que solo se produce una vez cada 12 años. A ello debemos agregar el referéndum ecuatoriano (febrero), las elecciones legislativas en El Salvador (marzo), las elecciones de diputados de la nueva Asamblea Nacional (marzo) quienes elegirán (en abril) al sucesor de Raúl Castro como el próximo presidente de Cuba, y las elecciones legislativas en los Estados Unidos, un verdadero plebiscito para evaluar los dos primeros años de Donald Trump y su futuro político.
El contexto latinoamericano de esas elecciones es complejo y cargado de desafíos. Se registra una conflictividad creciente y una gobernabilidad difícil en varios países de la región. En el rubro económico, si bien el crecimiento proyectado será mejor que el del año pasado, seguirá siendo débil (2,2% según la Cepal). La cifra resulta insuficiente para responder a las crecientes demandas de la clase media, evitar el aumento de la pobreza y de la desigualdad, y garantizar la creación de empleos de calidad.
AGENDA ELECTORAL
COSTA RICA dará el pistoletazo de partida el 4 de febrero con alta posibilidad de que sea necesario ir a un balotaje en abril. El desgaste de los principales partidos posibilitó la irrupción de candidatos emergentes, como Juan Diego Castro, del Partido de Integración Nacional, quien con un discurso populista y crítico de la política tradicional lidera por estrecho margen las encuestas. Le siguen Antonio Álvarez Desanti, de Liberación Nacional y Rodolfo Piza, de la Unidad Social Cristiana. La escasa diferencia entre los tres principales candidatos y el alto número de indecisos, anticipan una elección con final abierto. Temas centrales: corrupción (caso cemento chino) y abultado déficit público.
PARAGUAY irá a las urnas el 22 de abril para elegir en una sola vuel Presidente y Congreso. El PLRA y el izquierdista Frente Guasú, con el liberal Efraín Alegre como candidato presidencial, han conformado una coalición opositora, denominada Gran Alianza Nacional Renovadora (GANAR), para intentar desalojar del poder al Partido Colorado (ANR) liderado por Mario Abdo Benítez. Temas centrales: calidad de vida, el desempleo, la salud y la seguridad ciudadana.
COLOMBIA celebrará primero elecciones legislativas (marzo), para luego, el 27 de mayo, escoger a su presidente, pero no hay que descartar la necesidad de un balotaje. Estos comicios se caracterizan no solo por un alto nivel de fragmentación y de candidaturas
independientes sino también por una fuerte polarización entre derecha e izquierda y entre partidarios y críticos de los Acuerdos de Paz. Recientemente quedaron definidas las dos principales coaliciones: la conservadora que lideran los expresidentes Uribe y Pastrana, y que tendrá como candidato a Iván Duque o a Marta Lucía Ramírez; y una segunda, de centro, encabezada por Sergio Fajardo (Coalición Colombia). Existe la posibilidad de una tercera, aún en formación, de izquierda, en la que aún no hay un candidato claro, y en la que figuran nombres como Gustavo Petro y Clara López. A estas coaliciones hay que agregar la candidatura del ex jefe negociador de los Acuerdos de Paz (por el lado del Gobierno), Humberto de la Calle (del Partido Liberal), la del ex vicepresidente Germán Vargas Lleras –de centro-derechay la de Rodrigo Londoño “Timochenko” por las Farc. Temas centrales: corrupción, implementación de los Acuerdos de Paz con las Farc y negociación con el ELN, economía, empleo y salud.
México. Celebrará el 1º de julio uno de los procesos electorales más complejos e importantes de su historia reciente. Las elecciones se deciden en primera vuelta, ya que no existe balotaje. Andrés Manuel López Obrador, líder de Morena, encabeza la coalición anti priista y anti clase política tradicional, y lidera por el momento las encuestas.
En la lucha por canalizar el voto anti priista López Obrador pugna con la coalición (Por México al Frente) que han formado el PRD –centroizquierda– y el PAN –centroderecha– con Ricardo Anaya (panismo) como candidato presidencial.
El PRI busca seguir en Los Pinos con José Antonio Meade (tecnócrata y sin afiliación al priismo). Su apuesta es captar el voto de centroderecha y de las clases medias que temen un salto al vacío (López Obrador) o un gobierno muy heterogéneo como el que encarnaría la coalición PAN-PRD-MC. Temas centrales: corrupción, inseguridad ciudadana, riesgo de “venezolizar” México si gana López Obrador.
Brasil. El 7 de octubre es el turno de este país, donde también existe la posibilidad de que la presidencia se defina en un balotaje previsto para el 28 de octubre. El desarrollo y los resultados de estas elecciones dependen, en buena medida, del futuro judicial del expresidente Lula da Silva, quien si bien lidera todas las encuestas tiene un elevado nivel de rechazo. Además, de resultar condenado por unanimidad en segunda instancia (la sentencia será dictada el próximo 24 de enero) quedaría inhabilitado para aspirar a cargos electivos.
Los otros candidatos que ya expresaron su interés de llegar al Planalto son el populista de extrema derecha Jair Bolsonaro -segundo en las encuestas-, la candidata ecologista y de izquierda Marina Silva, el gobernador de San Pablo, Geraldo Alckmin (PSDB), y el actual ministro de Hacienda, Henrique Meirelles (PMDB), y la candidata ecologista y de izquierda Marina Silva. Sin Lula como candidato, el juego electoral será mucho más abierto e incierto. Temas centrales: la corrupción, economía, empleo, y la continuidad o no de las reformas estructurales adoptadas durante el mandato de Michel Temer.
Venezuela. Sobre la elección presidencial venezolana todo es una incógnita, por ahora, incluso su fecha de realización. Tampoco está definido si Nicolás Maduro concurrirá a la reelección, y si la oposición -actualmente debilitada y dividida- preferirá –en caso de que no estén dadas las garantías mínimas– abstenerse para no legitimar al régimen.
Habrá que estar atento, asimismo, para ver si del diálogo que viene teniendo lugar en la República Dominicana, entre el gobierno y la oposición, surge algún acuerdo que permita encontrar una salida pacífica y electoral a la grave crisis actual.
COMENTARIO FINAL
Los resultados del maratón electoral 2018 serán clave para definir las tendencias, dirección e intensidad del cambio político que vivirá América Latina en los próximos años.
Como hemos analizado, la gran mayoría de estas elecciones se caracterizan por un alto grado de polarización y de incertidumbre. Tampoco está claro la fuerza que los candidatos outsiders y populistas (muy presentes hoy en varias partes del mundo) tendrán durante estos seis procesos electorales presidenciales.
¿Sufrirá la región una recaída populista?, ¿ganará la izquierda moderada las estratégicas elecciones en Colombia, México y Brasil? o las clases medidas (más pragmáticas que ideologizadas y ubicadas mayoritariamente en el centro político) decidirán apostar por candidatos moderados de centro derecha, consolidando de esta manera el giro ideologico que la región inició en esa dirección con la elección de Mauricio Macri y Pedro Pablo Kuczynski (en Argentina en 2015 y en Perú en 2016), y que recientemente reconfirmó con la elección de Sebastián Piñera en Chile. Esto es lo que está en juego en el intenso y apasionante maratón electoral presidencial 2018
*Director regional para América Latina de IDEA Internacional
los resultados del maratón electoral 2018 serán clave para definir las tendencias, dirección e intensidad del cambio político que vivirá américa latina en los próximos años