Crecen nuevos modelos de negocio en Centroamérica, explicado por Julio Zelaya.
Centroamérica se ha sumado a la ola tecnológica, gracias a medios de pago confiables, de lo que se aprovechan los emprendedores
La figura del intermediario está en decadencia en los nuevos modelos de distribución. Los emprendedores centroamericanos también se están aprovechando de ello, aumentando el uso de los nuevos modelos de negocio.
La principal barrera, hasta el momento, ha sido el acceso a medios de pago confiables, que en cada país varía su utilización y legislación. “Estamos en un mundo global, pero en muchos casos operando con leyes locales, que inhiben las transacciones digitales. Todo emprendedor tiene acceso a mercados como el de Amazon, OLX, Udemy, Ebay u otros, en donde pueden llevar directamente sus productos y servicios a multitud de clientes en todo el mundo, pero no siempre se tiene o el conocimiento especializado (conocer referentes locales que puedan contar sus historias de éxito) o los recursos necesarios de soporte (medios de pago, facturación electrónica...)”, explica Julio Zelaya presidente fundador y CEO de Emprende U, y autor del best seller “La travesía: el poder de emprender”.
La principal recomendación del experto guatemalteco es abrir los ojos al exterior y asistir a ferias especializadas en el extranjero: “En donde se puede aprender qué han hecho emprendedores en mercados globales”, al ser usual en estas ferias escuchar de casos de países en desarrollo lograr resultados en países desarrollados.
A su juicio, el mundo se mueve hacia pocos intermediarios (menos en cantidad pero sólidos, integrados, confiables), lo cual tiene pros y contras para los emprendedores. “El principal PRO es acceso barato a clientes globales, con un único punto de contacto. El principal CONTRA es la
dependencia de un canal (muchas personas dependen de la mayoría de sus ingresos de canales como Amazon)”, apunta.
Cada vez más gente siente que puede emprender desde su casa, y los centroamericanos no son una excepción. Respecto a los principales nichos de negocio, asegura que la industria del conocimiento está en franco crecimiento. Esto quiere que decir si una persona es experta en algo, puede crear contenido especializado (a través de cursos, libros, o video blogs, entre otros).
“Ofrecer servicios –la uberización del trabajo–, está en auge: traducciones, ediciones, diseño... en plataformas como FIVERR, UPWORK u otras”, explica Zelaya, quien comenta que la tendencia es a tener múltiples fuentes de ingresos.
Clave para este 2018 es el tema del microconsumo. Con la facilidad de medios de pago, en gran medida por la vinculación de tarjetas de crédito y cuentas bancarias al móvil, se ha aumentado el fraccionamiento de consumo de productos y servicios.
Lo que antes estaba reservado a ventas de base de la pirámide (productos de canasta básica) “ahora se aplica a cursos online, juegos en línea, internet y saldos de telefonía”, explica el experto.
Las industrias que tienen más potencial para maximizarlo son aquellas en donde la oferta del producto o servicio ocurra de manera digital (cursos, ebooks, música, acceso a internet, juegos, entre otros), pues se tiene un acceso inmediato a la distribución y al fraccionamiento de la oferta. “Esto no quiere decir que industrias más tradicionales no puedan beneficiarse de esta tendencia, pero en muchos casos implica costos iniciales más altos. Un ejemplo de esto es el cambio de la gran imprenta a la imprenta digital de consumos menores o unitarios. Sin embargo, vemos claramente cómo los costos iniciales de montar un negocio como este inciden. La recomendación siempre es minimizar costos fijos y apalancar la mayor cantidad en recursos de terceros (como por ejemplo publicar usando CreateSpace de Amazon en donde todo el costo de impresión es variable)”.
Cuidado, pese a que en nuestra región hay altas tasas de emprendimiento, el porcentaje de fracaso de nuevos negocios sigue igual de alto, alrededor del 90%. Y las tres causas de esas caídas son las mismas que las de los más tradicionales, a juicio de Zelaya: “Emprender por las razones equivocadas (fundar un empleo en lugar de fundar una empresa sostenible); no prepararse (emprender cualquier cosa sin el conocimiento o la pasión por hacerlo bien); falta de controles (cash flow, temas fiscales, legales, entre otros)”.
¿Su consejo? “Emprender por oportunidad más que por necesidad. Querer hacerlo antes de tener que hacerlo. Combinar la pasión y los talentos”.
ACTUALIZACIÓN TECNOLÓGICA, CLAVE
¿Y qué papel juegan las nuevas tecnologías para el emprendedor actual? Para que nuestro emprendimiento tenga mayores probabilidades de tener éxito “la clave es estar actualizados”. La tecnología específica variará de empresa a empresa. “Hay que tener cuidado en hacer las cosas porque están de moda o porque “todos lo tienen”. Si voy a usar Instagram (o no) hay que saber por qué decido hacerlo (o no)”, incide.
Así, el emprendedor debe cuidar sus recursos y principalmente el más caro: el tiempo. “A qué le voy a dedicar tiempo y a qué no”. Por ello recomienda conocer foros especializados, congresos y otros emprendedores exitosos agilizará el aprendizaje y permitirá discernir qué usar y qué no. “Creo profundamente en la tecnología como un habilitador, pero creo más en la tecnología correcta”.
Los emprendedores también deben de tener en cuenta el papel del Small data en los negocios. “El término que acuña Martin Lindstrom en el libro que lleva el nombre me parece mejor explicado por Tricia Wang, que le llama Deep data, que es una comprensión más a profundidad de
insights de clientes. Creo que los emprendedores intuitivamente usamos el Small
data o Deep data para tomar decisiones”. Cuando se inician los negocios o cuando se crean prototipos usualmente vienen de una comprensión profunda de la problemática de un cliente específico. “Creo que es más en un estadío superior, cuando la empresa crece que pierde el contacto con sus clientes y busca sobre simplificar –con Big data– a sus clientes. Se cae en el riesgo de etiquetar y dejar de ver las tendencias”.
Así, la recomendación de Zelaya para el emprendedor centroamericano es utilizar técnicas como las que describe Lindstrom –etnografías, observaciones a profundidad– para conocer de primera mano a sus consumidores: “Con la digitalización caemos en el riesgo de querer conocer a nuestros clientes por su comportamiento en línea, sin recurrir a las herramientas complementarias cualitativas de conversación, observación, profundización. Nunca dejemos de conversar con nuestros clientes y recolectar información primaria”