Zamorano
LIDERA PRÁCTICAS RESPONSABLES DE ADAPTABILIDAD EN ECONOMÍA CIRCULAR
La institución avanza hacia la mejora en las fuentes renovables, mediante la generación de energía fotovoltaica, en el tratamiento, manejo y reducción de desechos, programas de manejo de residuos –reciclaje y producción más limpia y desarrollo de tecnologías amigables con el ambiente.
Para lograr los objetivos de sostenibilidad de la universidad y la región, Zamorano impulsa alternativas para la disminución de la economía lineal en el sector agrícola, agroindustrial y en el manejo de los recursos naturales, mediante prácticas dentro del campus que permiten una producción, consumo y reutilización de productos de manera responsable.
Entre las iniciativas que impactan, se encuentra el edificio del Departamento de Ambiente y Desarrollo, que gracias a su eco-diseñado, permite el ahorro de energía, a través de sus grandes ventanas que facilitan la iluminación natural; el techo del edificio proporciona dos servicios más: captar agua lluvia, la cual se almacena en una cisterna y albergar paneles solares capaces de brindar el 100% de energía, necesarios para los laboratorios de agua, energía y salones de clase, entre otros.
Como parte de las inversiones realizadaspara las buenas prácticas relacionadas con la Economía Circular, en 2016, Zamorano se convirtió en una de las primeras universidades en Latinoamérica en contar con un parque solar de 2.940 paneles solares que generan aproximadamente el 30% de la energía eléctrica
que demanda el campus, mediante la generación de 1 mega watt de energía fotovoltaica.
El compromiso de Zamorano es cuidar los recursos naturales, y para convertirse en una Universidad Verde, trabaja en la reducción de su huella de carbono, es por ello, que ha capacitado a sus docentes y personal administrativo sobre el tema, para que cada uno propicie desde su campo de trabajo la conciencia y las decisiones diarias de movilización, alimentación, consumos y manejo de materiales para mitigar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero.
Asimismo, cuenta con una planta de biodiésel para el aprovechamiento de desechos y un biodigestor que funciona como unidad de tratamiento de residuos y generador de energía. Tiene un proyecto de manejo integral de residuos sólidos y un relleno sanitario. El 80% de los residuos que genera el campus son recuperados como material reciclable y transformados como abono orgánico.
Otra de las iniciativas está enmarcada en la gestión integrada del recurso hídrico, desde: la protección, captación, potabilización y manejo eficiente, para finalizar con el tratamiento de aguas residuales.
El modelo adoptado también impacta de manera positiva en las zonas aledañas al campus, porque como parte del programa de Responsabilidad Social Universitaria de Zamorano, se maneja una serie de acciones con las comunidades vecinas relacionada a la protección y uso de los recursos naturales, colaborando además con programas de generación de energía fotovoltaica mediante la colocación de paneles solares en comunidades rurales donde no hay servicio de energía eléctrica, lo cual contribuye al desarrollo y sostenibilidad.