EL INFLUENCER SOCIAL
Dino Safie El Salvador
Las redes sociales son la ventana de este salvadoreño para pedir apoyo a su Solidaritón, una iniciativa que nació luego de pasar y ver varias carencias en la cuarentena por coronavirus en uno de los albergues habilitados al inicio de la pandemia para todo aquel que regresaba al país.
Ser un influencer positivo y con propósito es el objetivo de Dino Safie, un cantante de música católica que sumó miles de seguidores en medio de la pandemia por coronavirus. Ahora, utiliza estas plataformas para conseguir fondos y ayudar varias causas.
El número que Dino considera marca su 2020 es 175.000, la cantidad de veces que se reprodujo una de sus historias en Instagram. Se trató de un video en donde contó cuáles eran las necesidades dentro de uno de los albergues habilitados para mantener en cuarentena obligatoria a quienes regresaban al país, recintos administrados por el Gobierno de El Salvador que en los primeros días de la emergencia fueron señalados como caóticos. Dino llegó a uno de estos centros tras ingresar al país procedente de Guatemala, luego de un concierto de su banda de música católica Totus Tuus.
“Yo grabé videos de dentro del lugar, indicando las necesidades que pasábamos. En cuestión de horas se volvieron virales, me contactaron muchas personas y la empresa privada, que al final llevaron comida, ropa, y no solo donde yo estaba, sino a todos los centros habilitados. Fui como un vocero de todos los lugares, aun estando fuera de ellos, tras cumplir la cuarentena”, comenta.
El joven músico decidió enfocar su influencia positiva con los seguidores ganados, se quedó con el compromiso de ayudar e impulsó la creación del “Solidaritón”, una jornada para recaudar fondos y ayuda para los albergues. Su idea estaba prevista para ejecutarse en una semana y solamente para ayudar a estos refugios, pero las necesidades y la respuesta que tuvo le llevó a continuarla y a evolucionar hasta iniciar el camino de convertirse en una fundación. “Ya estamos en el último proceso”, indica.
Dino, que también es un profesional y trabaja en un negocio familiar, colabora con un equipo de al menos 20 personas y de otros voluntarios temporales quienes se dedican a identificar causas y ayudar. Las necesidades que atienden son muchas e incluyen el apoyo a pacientes que se mueven a una quimioterapia. “Dignificamos su traslado”, dice.
Como Solidaritón “hemos dado 10.000 canastas solidarias, construido casas desde cero o ayudado a reparar viviendas que se han dañado por las tormentas que azotaron a El Salvador en el 2020. Además, cuando se presentaron estragos por Eta e Iota llevamos ropa, colchonetas y alimentos a los que estaban en los albergues habilitados o a comunidades que son generalmente olvidadas. Esto ya empezó, no para”, agrega.
Solidaritón se mantiene actualmente de donaciones de particulares, ventas de artículos y además de los ingresos que suma como influencer social.
Siendo un personaje influyente dentro de El Salvador, marcas de restaurantes, tecnología y banca lo han buscan para promoverlas. “Las campañas de estas marcas nos sirven para sumar a la causa y darle visibilidad. Todo lo que gano va para el Solidaritón”, comparte.”