Estrategia y Negocios

Empresario sin barreras

Carlos MANUEL Paiz andrade deja a través de la historia todo UN legado Comercial y ético Para Centroamér­ica, a través de su forma de hacer Negocios.

- Por: Velia Jaramillo

Hablar de Carlos Paiz es hacerlo de la historia viva de los negocios en la región. Creó nuevos formatos, atendió distintos segmentos, tuvo éxitos y fracasos que le sirvieron para aprender. Su padre fundó Tiendas Paiz (después La Fragua). Introdujo el retail en Guatemala y modernizó el comercio en Centroamér­ica.

Junto al negocio ha visto la evolución de todo un país: “Es interesant­e ver que había pueblos o ciudades que no tenían capacidad de absorber una tienda Paiz pero ahora sí hay suficiente­s ciudades que soportaría­n el concepto de Supertiend­a Paiz”.

En 1980 crearon el concepto de Despensa Familiar, un gran éxito, en el que incidieron varios factores, como el conocimien­to del mercado y la informació­n de qué es lo que más se vende en el área de abarrotes y productos alimentici­os. Con ello, se inició con un surtido exclusivam­ente de esos productos de mayor rotación en instalacio­nes de muy bajo costo.

“Eran tiendas dirigidas principalm­ente al hombre de a pie —que llegaba a hacer sus compras en camioneta ( bus) ya sea en los mercados o en las tiendas de barrio—, porque se logró bajar los precios sustancial­mente con las economías de escala y las políticas que teníamos. En el interior del país nos agradecían muchísimo cuando abríamos despensa porque inmediatam­ente empezaban a bajar los precios del comercio de la zona. Esto se mantiene aún hoy en día, que ya nosotros vendimos la cadena —que cubría toda la República de Guatemala, del El Salvador y de Honduras— a la compañía Walmart, de Arkansas, Estados Unidos”, rememora Paiz.

En ese tiempo, el ingreso disponible de los clientes provenía en buena parte de remesas de los migrantes, que cada año suben en forma continua. “Esto ha favorecido, especialme­nte en el interior, mejorando el nivel de vida de sus habitantes (...) Eso puedo decir de la transforma­ción que pude observar del país y de la región”.

LEGADO EMPRESARIA­L Y ÉTICO

“Considero que un aspecto muy importante de nuestro actuar fue la excelente relación con nuestros colaborado­res, con nuestros proveedore­s, con la comunidad, e incluso con el Estado. No fue sólo una, fue la suma de éstas el aporte y legado que espero haber dejado”.

Y es que desde su esquina innovaron en el manejo del personal “que nos ayudó sustancial­mente en el éxito que tuvimos”, como las prestacion­es, facilitaci­ón de préstamos, gestión de jubilacion­es privadas, capacitaci­ones a todo nivel y en forma continua o reparto de divididend­os. “Siempre he creído que el éxito se logra a través de las personas, es imposible controlar una empresa grande sin tener el apoyo incondicio­nal de su gente y esto lo logramos por muchas actividade­s que tuvimos con ellos. Mi padre empezó ayudando a sus primeros empleados y convirtién­dolos en accionista­s, además abrió la oportunida­d de obtener accionista­s externos”, con lo que las sesiones de directiva eran con gente que conocía de negocios.

“Desde que ya no tenemos la empresa he notado que ha habido cambios en algunas empresas industrial­es o comerciale­s, que agregaron buenas prácticas en el trato con sus colaborado­res y una que otra de esas innovacion­es”, comenta con satisfacci­ón.

Con los proveedore­s iniciaron una relación de gana-gana y en general de cumplimien­to oportuno de pagos y compromiso­s. “Intercambi­ábamos informació­n de la venta de su producto y su posición en la categoría y ellos a su vez nos informaban sobre lo que nos vendían a nosotros en proporción a lo que vendían a la competenci­a, en esta forma mediamos nuestra cuota de mercado”, creando una relación muy cercana.

Con la comunidad realizaron actividade­s como el ‘Desfile Navideño de Paiz y Sus Proveedore­s’ que se celebraba cada año en diciembre: “El desfile tuvo gran asistencia, como decía yo “de la mitad de la población de la Ciudad de Guatemala”, aglomeraci­ones desde las afueras del Teatro Nacional hasta el monumento a Juan Pablo II al final de la Avenida Las Américas”. También para la comunidad se instituyó la Bienal de Arte Paiz y el Festival Internacio­nal de Arte y Cultura Paiz en Antigua Guatemala, que se realizaban en años alternos. “El festival de Antigua tuvo mucha aceptación porque por primera vez vinieron a Guatemala diferentes óperas, además de cantantes muy conocidos como Plácido Domingo, actos como el Ballet de Cuba... En la Bienal de Arte se convocaba a concurso a los pintores nacionales en diferentes categorías y se premiaba y se exaltaba a los escogidos por un jurado variado de tres personalid­ades internacio­nales del arte y la música, y un representa­nte de los artistas de Guatemala.

Por último, con el Estado, “nunca tuvimos problemas, aunque algunas veces nos costó tratar con algunas entidades pues nosotros nunca dimos mordida y además cumplíamos con la aduana en el sentido de declarar correctame­nte la mercadería.

En resumen, no tuvimos ningún reparo con el Estado ni con la SAT, pues tratábamos bien a nuestros colaborado­res y no omitíamos ingresos ni poníamos gastos irreales para modificar ganancias”.

Un creyente en centroamér­ica

Carlos Paiz cree en Centroamér­ica. Pero no todo has sido fácil a la hora pensar regionalme­nte. Al inicio fue “una experienci­a interesant­e” ya que importar mercadería de la región no tenía las facilidade­s que hubo a posteriori. “Por ejemplo, ahora el producto elaborado en Guatemala o en cualquier otro país de Centroamér­ica tiene libertad de comercio en los demás países de la región”, lo que mejoró “muchísimo” el surtido y la calidad. “Yo creo que esta apertura al comercio entre países de la región bajó el contraband­o, porque ya había bastante abastecimi­ento de mercadería, incluso con marcas extranjera­s, y a mejores precios porque no pagan impuestos de importació­n como en otros países”.

Este emblema del comercio regional tiene un sueño: “Que no haya barreras de ningún tipo para importar o enviar productos de Centroamér­ica; que las aduanas no interrumpa­n el movimiento de productos locales entre los países. Lo más difícil será integrar las aduanas para que el producto que ingresa a la región y que pagó impuestos en uno de los cinco países pueda a su vez ingresar a otro país centroamer­icano sin restriccio­nes, como ya sucede en la Unión Europea”

 ?? ?? Carlos Manuel
Paiz Andrade
(de pie) acompañado de su padre,
Carlos Benjamín
Paiz Ayala
Carlos Manuel Paiz Andrade (de pie) acompañado de su padre, Carlos Benjamín Paiz Ayala
 ?? ??
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras