Op art habitable.
Una arquitectura que encuentra la espectacularidad en la sobriedad e invita a la meditación, relajación y re lexión.
Ubicada al interior de un nuevo fraccionamiento en la ciudad que le da nombre, Casa Cancún es una de las más recientes obras del arquitecto mexicano Francisco Elías. Con ella no sólo busca ser conocido como un extraordinario arquitecto e interiorista, también como un gran constructor y un profesional con una visión total sobre soluciones de espacios.
La residencia fue creada para una pareja proveniente de la Ciudad de México, la cual solicitó que su hogar en la playa fuera espectacular. La respuesta de los proyectistas para obtener esta monumentalidad fue concebir una edificación elaborada 100 por ciento en concreto armado. Su estructura monolítica, además, posee un valor añadido, pues algunos de los muros tienen una integración plástica y son una obra de arte en sí mismos. Para erigir dichas estructuras se invitó al artista colombiano Ramón Laserna, quien diseñó triángulos que van de arriba hacia abajo por toda la superficie; éstos constituyen piezas ópticas que proporcionan sensaciones de luz y sombra. Para ello, se inspiró en los lineamientos del optical
movimiento del siglo XX que tuvo una gran influencia en Venezuela y Colombia el siglo pasado.
Estas paredes están situadas en la parte media de la vivienda y perfilan su pasillo central. De hecho, dicha circulación se convirtió en el eje rector de este trabajo, cuya forma produce un efecto de profundidad, pues de la entrada al fondo del terreno se vuelve cada vez más ancho.
Para poder levantar estos muros, así como el resto de la construcción, se fabricó una cimbra de 19 milímetros de espesor hecha por ebanistas de Ecatepec. Asimismo, el Studio Francisco Elías estuvo asesorado por el Centro de Tecnología del Cemento y del Concreto de Cemex y, gracias a ello, se utilizaron 12 tecnologías diferentes para poder colar el concreto con éxito, procesos que tienen que ver con colores, rapidez, dureza y resistencia, entre otras características.
Finalmente, un elemento que fue esencial para destacar esta propiedad fue el diseño de iluminación, descrito por el arquitecto Francisco Elías de la siguiente manera: “El sol es el que realmente revela, enfatiza, dramatiza y genera teatralidad en los volúmenes, pero cuando el sol se va, queda la luna, y si ésta también se marcha, entonces entra la luz artificial, que tiene como objetivo hacer énfasis en los elementos arquitectónicos.” •