DISEÑO A CUATRO MANOS
El dúo del despacho Bismut & Bismut Architectes reinventó este departamento parisino donde cada rincón tiene una función.
El dúo del despacho Bismut & Bismut Architectes reinventó este departamento parisino.
“Quisimos crear un estuche acogedor dando funciones a todos los espacios, incluso los de transición”, DANIEL Y MICHEL BISMUT.
En un edificio haussmaniano del sexto arrondissement de París, a algunos pasos de los encantadores jardines de Luxemburgo, este departamento familiar de 300 metros cuadrados necesitó repensar la organización de los espacios para ofrecer a sus moradores una mayor funcionalidad. La antigua cocina se situaba al fondo del departamento y el plano de origen incluía numerosas separaciones, por lo que se decidió quitar varias paredes. Estos cambios permitieron optimizar la circulación y dejar entrar mucho más luz natural.
“Queríamos respetar el lugar, y ya que tuvimos que hacer cambios estructurales importantes, recreamos cornisas para dar la sensación de que siempre habían estado aquí gracias a sus proporciones correctas. Además, quitamos el antiguo par
quet y recuperamos lo que se podía para renovarlo y reinstalarlo”, expresaron Daniel y Michel Bismut, los cofundadores del despacho Bismut & Bismut Architectes, con sede en la capital francesa.
Los dos hermanos manejan perfectamente el arte de combinar distintos materiales —como la madera, el mármol, el metal y el vidrio—, de crear contrastes sutiles, de introducir superficies coloridas y de mezclar mobiliario contemporáneo y vintage. A través de este mix, se generó armonía entre lo vacío y lo lleno, y entre las líneas y los volúmenes, en espacios donde el vocabulario arquitectónico simplificado se enfoca en lo esencial. “Deseábamos dar ritmo y calidez con todas estas mezclas, siempre a cuatro manos. Imaginamos todos nuestros proyectos juntos, del más grande al más pequeño. Siempre intercambiamos ideas a lo largo del proceso creativo, ya sea que se trate de arquitectura, diseño interior o mobiliario y sin importar la escala del proyecto”, confesó el dúo.
Una amplia entrada da hacia el espacio de vida principal, que cuenta con una doble sala con una cocina integrada. A los lados, dos alas conducen a dos dormitorios con sus cuartos de baño. “Todo fue muy libre y abierto con nuestros clientes. La idea fue concebir un estuche acogedor y dar funciones a cada espacio, incluso las áreas de transición, como la entrada y los corredores, donde integramos una oficina y una biblioteca”, expresaron Daniel y Michel Bismut.
En el comedor, adornado con la lámpara de suspensión Highwire de latón y de cuero de Apparatus y una fotografía de Irving Penn, la mesa Tye de nogal de Christophe Delcourt rodeada por las sillas Superleggera de Gio Ponti (Cassina) se combina con un panel de madera oscura vertical sobre el cual destaca una obra naranja del artista Philippe Parreno.
En la sala, el sofá Extra Wall de Piero Lissoni (Living Divani) y dos sillones escandinavos de los años 50 comparten el espacio con algunas piezas diseñadas por Bismut & Bismut, como la mesa de centro Block de metal y mármol.
El rincón dedicado a la oficina fue decorado con una composición del fotógrafo alemán Hans-peter Feldmann y amueblado con la silla Cherner de 1958 de Norman Cherner y un elegante escritorio suspendido cubierto de cuero creado por Bismut & Bismut. Sobre éste se encuentra la icónica lámpara Snoopy de Achille y Pier Giacomo Castiglioni (Flos) diseñada en 1967. Con sus motivos triangulares coloridos, el tapete Diamond Soie de Cc-tapis ofrece una sorpresa visual. Gracias a sus paredes azules, la sala de televisión es acogedora e invita a relajarse.
En este proyecto, la luz fue de gran importancia. Empleada por Daniel y Michel Bismut para prolongar las perspectivas, se volvió un elemento esencial para cambiar la escala del espacio y su percepción.