Diseño moderno y estilo escandinavo se fusionan en esta casa de Los Hamptons.
Diseño moderno y estilo escandinavo se fusionan en esta casa de Los Hamptons.
“Los materiales naturales como la madera, el cuero y la lana conforman la paleta neutra”, CHELSIE LEE.
El azar hace bien las cosas. Radicadas en Portland, Oregon, Jessica Helgerson y Chelsie Lee se encontraban en Nueva York —visitando a clientes— cuando la dueña de esta casa en Los Hamptons las contactó tras haber visto su trabajo en la web. Las dos diseñadoras fueron a tomar un café con la propietaria y aceptaron trabajar con ella inmediatamente.
¿El proyecto? Una casa de 279 metros cuadrados localizada en Amagansett, una pequeña ciudad costera encantadora en la región chic de Los Hamptons, en donde los neoyorquinos suelen ir frecuentemente para recargar energía en una atmósfera apacible, junto a la orilla del mar.
La transformación fue radical. “Los dueños (una pareja) compraron la casa por su localización excepcional y por la privacidad que ofrece la propiedad, pero no les encantaba la estética de los años 90”, comentó Chelsie Lee, diseñadora senior. Para que el exterior resultara más atractivo, los muros se pintaron de blanco, se añadió un portal en la parte delantera de la casa y se reemplazaron varias ventanas.
El equipo de Jessica Helgerson Interior Design trabajó con el despacho local de arquitectura TBD Architecture + Design Studio, y juntos exploraron varias opciones. Como resultado, la organización de los espacios fue modificada por completo y casi todas las áreas cambiaron de lugar. “Tuvimos varios objetivos en este proyecto, pero uno de los mayores fue crear un plano con muchos espacios para leer y relajarse”, compartió Chelsie Lee. La nueva cocina ocupa lo que antes era el portal; la escalera se abrió y se agregaron dos dormitorios, una sala de baño y dos áreas acogedoras con cómodos sofás.
La paleta restringida, basada en el blanco, está conformada por madera pintada, baldosas elaboradas a mano, mármol y latón. El piso de roble de origen fue preservado, y vigas y paneles de madera fueron colocados en el techo para brindar textura y personalidad. Además, detalles de cuero natural y de lana crean espacios cálidos con toques orgánicos.
El equipo de Jessica Helgerson Interior Design tomó como referencia el estilo relajado de los dueños para escoger los muebles, las lámparas y las obras de arte, mezclando piezas modernas y danesas. “Nos inspiramos mucho en los acogedores refugios escandinavos y en las casas de playa australianas”, comentó Chelsie Lee.
En el comedor bañado de luz natural, una mesa de Another Country se combina con un chandelier de Apparatus Studio y una silla Sibast No 8. En la sala suspendida, la PP130 Circle Chair es de Hans Wegner, y la lámpara de piso es de Rich Brilliant Willing. Para complementar el look, algunas piezas fueron diseñadas a la medida por Jessica Helgerson y Chelsie Lee, fabricadas en Portland y enviadas a Amagansett, como la isla de la cocina y el escritorio.
“Los propietarios soñaban con tener un refugio con calidez y estilo, lejos de la ciudad. Diseñamos la casa con el fin de que fuera un telón de fondo sereno para sus visitas durante los fines de semana”, explicó Chelsie Lee. Nadar, leer, ver películas y disfrutar con la familia son algunas de las actividades predilectas de los dueños, cuya vida y personalidad se entrelazan en esta espectacular residencia.