RUMBO AL ÉXITO
Honor, integridad y responsabilidad son las guías que llevan a los jóvenes de New Mexico Military Institute a convertirse de adolescentes a ciudadanos modelo; conoce su propuesta, directamente de voz de uno de sus integrantes.
Nivel preparatoria y dos años de junior college (tronco común de la universidad) es la oferta educativa de New Mexico Military Institute (NMMI, siglas en inglés), que entre sus atributos principales ofrece una estructura militar para la formación de jóvenes líderes. Ubicado en la ciudad de Roswell, Nuevo México, el instituto cuenta con una planta estudiantil de más de 900 alumnos y alumnas de al menos 33 nacionalidades distintas, entre las cuales la
mexicana ocupa casi un 10% de todo el alumnado.
Para conocer la experiencia, TODO SOBRE ARIZONA platicó con Diego Salido Alejandri, joven hermosillense que está por iniciar su quinto ciclo escolar en NMMI; este año él recibirá el cargo militar más alto que existe entre los alumnos del instituto: comandante de Regimiento.
El estudiante de 19 años compartió que al ingresar al instituto existe un proceso de adaptación, en el que los cadetes no tienen permitido tener contacto con el mundo externo por tres semanas; tiempo en el que también tienen princi
palmente entrenamiento físico. "Las primeras tres semanas no tienes contacto con tu familia, y sí está difícil pero a la vez te ayuda a desconectarte de este mundo y empezar a concentrarte allá; le echas más ganas, y cuando te devuelven tu teléfono y tu computadora, ya estás en aquel programa", relató. Uno de los principales retos que los cadetes de NMMI afrontan es adaptarse a la estructura militar, que a la vez se traduce en el desarrollo de habilidades y su formación como individuos cívicos, complementando su formación académica.
"Estás siempre muy apurado, tienes que ser muy organizado: las clases son las mismas que tomas en 'prepa' en cualquier parte: química, ciencias, biología, física, inglés -para aprender a usarlo y escribirlo-, literatura", comentó.
Su código
La vida académica de NMMI es intensa: en busca de la excelencia, dijo, los grupos son de un máximo de 16 alumnos, por lo que como estudiantes se encuentran atendidos y en confianza para pedir asesoría con los profesores. El deporte y la actividad física son una parte importante de la formación de los chicos y chicas del instituto, es por ello que todos los días los llevan a cabo.
"Sí es pesado, pero no te van a poner a hacer algo que de verdad no puedas hacer, o sea, no hay riesgo de que te vayas a lastimar haciendo algo", aseguró; "hay entrenadores profesionales supervisando todo, todo está en sacarte de tu zona de confort y que crezcas". El temple y carácter de los cadetes se guía por el Código de Honor de la institución; la organización militar permite que los estudiantes accedan a rangos gracias a sus buenas calificaciones y excelente conducta.
"Un cadete no va a mentir, robar ni hacer trampa, son los pilares principales de la escuela. Hay una Junta de Honor que está a cargo de penalizar cualquier infracción a ese código, el año pasado me tocó ser el jefe de ese equipo", compartió.
En el nuevo ciclo, Diego tendrá el cargo de comandante de Regimiento, estará a cargo de los más de 900 cadetes de la institución y será el contacto entre éstos y las autoridades militares de la escuela.
Así como en su momento José, el hermano de Diego graduado de NMMI, le recomendó optar por el instituto para su educación media superior, así él la recomienda. "Por la gente que vas a conocer allá, las amistades que haces ahí se quedan para toda la vida. Para salirte de tu zona de confort, te ayuda mucho a crecer como persona, a ver qué otras opciones hay en el mundo", finalizó.