Amaga Alito: si vuelven al plantón, habrá consecuencias
ESCÁNDALO PUEDE ALCANZAR A FUNCIONARIOS DE ALTO RANGO Y A GRANDES EMPRESARIOS DEL PAÍS
CIUDAD DE MÉXICO.– Si alguien sabe del peso de las venganzas políticas, es el periodista y escritor Jesús Lemus Barajas, quien señala que, con la detención de Luis Cárdenas Palomino, exdirector de Seguridad Regional de la Policía Federal y mano derecha de Genero García Luna en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, aún queda un abanico de delitos por ser investigados que van desde el narcotráfico hasta los asesinatos de oficiales de la Policía Federal Preventiva.
A decir del autor de “El Licenciado” y “Jaque a Peña Nieto y su Imperio de la Corrupción”, Cárdenas Palomino fue encarcelado por el delito de tortura a Eduardo Estrada Granados, Ricardo Estrada Granados, Sergio Cortez Vallarta y Mario Vallarta Cisneros.
Sin embargo, reflexiona Lemus Barajas, hay mucho más de fondo para ser investigado y enumeró los asesinatos de varios elementos de la Policía Federal
de tiempos de Calderón, entre los que destacan: Millán Gómez, jefe de la División de Mandamientos Judiciales y Ministeriales; Velazco Bravo, director de Inteligencia contra el Crimen Organizado; Aristeo Gómez Martínez, ex director de la Jefatura del Estado Mayor de la Policía Federal Preventiva; Bayardo del Villar, inspector de Operaciones de la PFP e Igor Labastida Calderón, comandante de la PFP, quienes fueron ejecutados y
sus asesinatos nunca se esclarecieron plenamente.
Agregó que de esta herencia que pasó del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa a Enrique Peña Nieto (EPN), habría que investigar hasta dónde llegan los hilos conductores del caso de Cárdenas Palomino, que podría llegar al sector empresarial. Tal es el caso de la gran relación que mantuvo con Grupo Salinas, cuyo dueño es el empresario Ricardo Salinas Pliego.