EL CONTROL PRENATAL PUEDE AYUDAR A PREVENIR CUALQUIER SITUACIÓN QUE AFECTE AL BEBÉ EN DESARROLLO
Se le denomina sufrimiento fetal o diestrés fetal a las alteraciones que se producen en el feto antes o durante el parto, de tal forma que inciden negativamente en su fisiología. Dichas alteraciones vienen a ser las lesiones que sufre el feto como consecuencia de las complicaciones que puedan surgir cuando el feto aún se encuentra dentro de la placenta.
Asimismo, este término también es utilizado para designar cualquier cambio en el bienestar del feto; que por lo general, suele ser falta de nutrientes u oxígeno (a través de la placenta) entre la madre y el feto.
Por esta razón es muy importante el control prenatal y prestar atención a todos los cambios que ocurren durante la gestación.
La causa más común de sufrimiento fetal es la falta de oxígeno o bien porque el cordón umbilical está siendo comprimido o por otro tipo de complicaciones, como pueden ser las hemorragias.
A continuación te mostramos las principales señales de sufrimiento fetal.
Si la mamá siente que el bebé deja de moverse, es urgente que acuda al doctor
A pesar de que sus hojas también son comestibles es más común que se consuma únicamente la raíz.
Posee un sabor muy dulce que se aprovecha para la obtención de azúcar y su pulpa es utilizada para la producción de colorantes.
El betabel es buena fuente de betacarotenos, antioxidantes y fibra, por lo que fortalece el sistema inmune, previene problemas de la vista y mejora la digestión, entre otras cosas.
Los antioxidantes evitan la aparición de enfermedades cardiovasculares
Si el sufrimiento fetal es detectado a tiempo, se reduce el riesgo de afectaciones graves tanto para lo progenitora como para el futuro recién nacido. al bloquear los radicales libres que modifican el “colesterol malo”, con lo que contribuyen a reducir el riesgo cardiovascular y cerebrovascular.
Su consumo también se ha asociado con un efecto antihipertensivo debido a su alto contenido de nitratos.
De su contenido de vitaminas y minerales destacan los folatos, potasio, fósforo, magnesio y calcio, lo que lleva a una correcta coagulación de la sangre y al fortalecimiento de los huesos.