DENUNCIA A ESTAFADORES EN LA ISLA
Haitianos habrían encontrado una forma de estafar a empresarios carmelitas, dejándoles millonarios adeudos por inmuebles.
CD. DEL CARMEN. Una estafa haitiana ha puesto a temblar la isla de Ciudad del Carmen, extranjeros que han logrado encontrar lagunas en la ley para la adquisición de bienes inmuebles y en contubernio con notarios públicos, solicitan millonarios prestamos con propiedades que tienen gravamen, estafando a múltiples empresarios isleños.
Antoine Roland Belizaire es de origen haitiano, inexplicablemente y en corto tiempo formó empresas como RB Avituallamiento y Comercialización, S.A. de C.V. Y la Comercializadora de la Isla, S.A. de C.V. Pero también es dueño de múltiples propiedades con un porcentaje en acciones.
De acuerdo al artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, señala que solo los mexicanos por nacimiento o naturalización, así como las sociedades mexicanas, tienen el derecho de adquirir el dominio de las tierras, aguas y sus accesiones o para conseguir concesiones de explotación de minas o agua, salvo algunas excepciones.
Pero Antoine Roland ha encontrado la forma de la explotación de cierto bienes nacionales mediante prestanombres, uno de ellos el de su trabajador mexicano Dionicio Estrada Juárez, cuya actividad quedó expuesta luego de entregar en garantía una propiedad tras un préstamo de un millón de pesos, pero el inmueble contaba con tres diferentes gravámenes.
El tufo de la cloaca destapada llegó a notarios, en este caso la número 12 licenciado Jaime Antonio Boeta Tous, quien plasmó dicho acto de amparo de la escritura pública número 849 de fecha 30 de junio del año 2021, entregada como garantía con su carta de libertad de gravamen.
Luego de un año y tras el error cometido por el propio notario al entregar las escrituras al arrendatario, se encontró que la propiedad se encontraba gravada y previamente a la fecha de celebración del contrato de mutuo de junio del 2021, por dos personas más y por sumas estratosféricas.
Este ha sido el modus operandi del haitiano que de la noche a la mañana se volvió millonario en Ciudad del Carmen, bajo el manto de notarios públicos que falsifican documentos para obtener jugosas ganancias estafando a empresarios.