La respuesta de México
Con base en este diagnóstico, el Gobierno de México expidió su “Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de los Polinizadores (Encusp)”, ante la relevancia que tiene el proceso de la polinización para el bienestar del país.
“En la actualidad se reconoce la polinización como un servicio ambiental del que depende entre el 80 y 85 por ciento de los productos cultivables que se generan en México, como el frijol, el chile, el tomate, la calabaza, el jitomate, la ciruela, el mango, la manzana, la guayaba y el café, entre otros. La polinización es fundamental para mantener la agrodiversidad y la integridad ecológica, por lo que también es una piedra angular para el bienestar del país”.
Por lo tanto, el declive en la población de polinizadores representa un riesgo que no es exclusivamente ambiental: “Proteger a los polinizadores es una necesidad que tiene motivaciones sociales, económicas, ambientales y culturales”, señalan las autoridades mexicanas.
Con esta estrategia, México se alinea con una preocupación global por la supervivencia de los polinizadores, fundamentada en que sus servicios benefician la propagación y producción de más del 60 por ciento de todas las plantas cultivadas, y es fundamental para la producción de hasta el 70 por ciento de los cultivos usados directamente para el consumo humano; los polinizadores están vinculados con el rendimiento de al menos 87 por ciento de los cultivos de entre los de mayor importancia para la alimentación en el mundo.
Ejes estratégicos
La “Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de los Polinizadores (Encusp)” fue diseñada con ocho ejes temáticos que consideran desde la generación de estudios científicos en la materia, hasta acciones de intervención para conservar los hábitats de los polinizadores.
Estos ejes son: Conocimiento Científico y Tecnológico; Conocimientos Tradicionales e Intercambio de Experiencias y Saberes; Participación Social y Educación; Normatividad y Regulación; Instrumento de Planeación y Presupuesto; Valoración de los Polinizadores y sus Hábitats; Paisaje, Conectividad y Aspectos Bioculturales; y Fomento a la Producción Sustentable y Amigable con la Biodiversidad.
De esta manera, se pretende proteger las poblaciones de los polinizadores pues se ha documentado que en todo el planeta hay un descenso poblacional de grupos de polinizadores incluyendo especies de abejas silvestres y manejadas y lo que está en juego es la seguridad alimentaria de México.
“El declive y la pérdida de polinizadores son amenazas serias para la seguridad y soberanía alimentaria. Por esto, se considera fundamental que México adopte en el corto plazo una estrategia nacional para la conservación y el manejo sustentable tanto de los polinizadores como del proceso de la polinización”.
La producción de cultivos con alguna dependencia a polinizadores está gravemente amenazada por el declive de polinizadores a nivel mundial
El declive y la pérdida de polinizadores son amenazas serias para la seguridad y soberanía alimentaria” Gobierno de México Estrategia Nacional para la Conservación y Uso Sustentable de los Polinizadores