Corcholatas capitalinas
El retraso en definir al candidato de Morena para la Ciudad de México, tiene dos vertientes. La primera es que la dirigencia del partido en la capital, encabezada por Tomás Pliego, es frígida y sin influencia. La segunda es porque en cuanto se defina al abanderado presidencial, su voz se tomará en cuenta para tener una dupla capaz de asegurarle votos en la capital.
El boquete hecho a Morena en 2021, en la capital del país, por parte de la alianza Va por la CDMX, fue suficiente para replegar al partido en el poder. Ahora, el escenario es otro por ello es que especialistas consideran que no hay “corcholatas capitalinas”, ya que la sumisión de la presidencia de Tomás Pliego espera los tiempos de la dirigencia nacional para operar en espejo.
Hasta, antes de la marcha de defensa del INE, Martí Batres se perfilaba como el candidato natural, sin embargo, el minimizar el número de participantes en la marcha, lo debilitaron e incluso lo borraron de las recientes encuestas. Además, Morena en la ciudad y de la mano de Tomás Pliego es un partido timorato y achicado que no toma decisiones. En contraste, la Alianza por la Ciudad ya le lleva meses de ventaja de trabajo y varios destapes. Sus adversarios ya tienen varios nombres entre hombres y mujeres para salir a la pelea de 2024.
Por el PAN se menciona a la senadora Xóchitl Gálvez y Kenia López Rabadán, al alcalde en Benito Juárez, Santiago Taboada y a la alcaldesa en Álvaro Obregón, Lía Limón; por el PRI al alcalde de Cuajimalpa, Adrián Ruvalcaba, y del PRD a la dirigente partidista Nora Arias.
Morena en la ciudad no tiene listo el relevo para la jefatura de gobierno. No hay un estratega electoral que dé los lineamientos por donde transitará el partido. Pliego está a la espera de lo que ocurra con los candidatos presidenciales de su partido para comenzar a trabajar el proceso interno y acompañar al candidato. Pero si tarda más tiempo, el