Ellas, un ejemplo a seguir
Ellas nos hacen creer en que nuestro futbol femenil tiene un gran futuro, porque son chicas que no buscan los reflectores, ni tener los millones gracias a los patrocinadores; son chavas que juegan por amor a la camiseta y, claro, al futbol.
Están a un paso de colocarse en la final del futbol en los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2018 en Barranquilla, Colombia, y buscan refrendar el título ganado en Veracruz, hace ya cuatro años. Y seguro lo lograrán, porque esta selección se ha formado con lo mejor que tenemos, grandes futbolistas que a escala nacional e internacional demuestran que hay calidad en nuestro balompié femenil.
Charlyn Corral es el gran ejemplo. La mexicana buscó cabida en Europa y su nombre ya está enmarcado en la historia del futbol de España y de México, porque en la temporada 20172018 se llevó el Pichichi, al sumar 24 anotaciones en el año, siendo así la primera mexicana en conquistar el Viejo Continente con sus goles. Por otro lado, Kenti Robles, del Atlético de Madrid, también ha sobresalido con las ‘Colchoneras’, pues se llevó el galardón al mejor gol de la temporada, donde peleó en la contienda con Corral.
Ellas son el ejemplo de muchas niñas que sueñan con ser futbolistas profesionales, o de quienes tienen que dejar todo para buscar alguna oportunidad lejos de su familia, porque muchas no logran alcanzarlo, ya que dejan de lado su sueño por el abuso de sus entrenadores.
Estas 20 futbolistas que están en Barranquilla son el esfuerzo y dedicación de las mujeres que tienen que luchar por encontrar un lugar dentro de una sociedad machista como lo es la mexicana. Porque en la televisión sólo vemos a hombres sentados en una mesa redonda analizando futbol de hombres, difícilmente vemos una mesa de análisis entre mujeres.
Y así como ha costado tener analistas y locutoras mexicanas en el futbol, también costó tener una Liga Femenil, y de la cual nos debemos sentir orgullosos de tenerla, porque han salido grandes jugadoras como: Mónica Ocampo, Greta Espinosa, Karla Nieto, Cecilia Santiago o Esmeralda Verdugo.
Ellas son un ejemplo a seguir, ellas son el motivo de muchas para alcanzar cada uno de nuestros sueños. Hoy sólo me queda decir, “suerte chicas, sigan poniendo en alto sus nombres”.