ÓSCAR SCHWEBEL
¿Cambia la música por la escritura?
Diferente a lo que nos tenía acostumbrados, El Chivo decidió atreverse y mostrarse ante el público en una nueva faceta como escritor, pasión que ha tenido desde niño pero que hasta ahora se atrevió a mostrar.
“Yo sé que es extraño. Desde que soy escuincle, así como muchas chavitas escriben su diario, yo también siempre he escrito. Mi padre me inculcó el hábito de la lectura. Crecí entre libros de Tolkien, Asimov, y ya más grande con los cómics de Alan Moore y Joseph Campbell, por supuesto.
“Siempre para mí, escribir fue como una segunda naturaleza, lo que pasa es que nunca lo compartía con nadie, y aparte mi trabajo era otro que tenía que ver con la música”, compartió.
Fue durante la pandemia que Óscar se encontró con textos y fragmentos inconclusos que tenían mucho en común y personajes que se podían hilar entre sí para crear una gran historia. “De repente me encontré a mí mismo con un libro en las manos, aunque mi intención era tenerlo en mi computadora como algo personal. Fue como mi terapia durante la cuarentena.
“Una amiga editora me dijo: ¡Sácalo! ¿Por qué no lo compartes con el mundo? Y yo me negaba porque me sentía muy vulnerable, al final es un campo absolutamente virgen para mí. Acepto que desconozco en su totalidad esta área en la que estoy experimentando, pero creo que una de las moralejas que nos deja este año que pasó es atrevernos a hacer las cosas y como un acto de valentía, es que me atrevo a sacar este material”, confesó.
Los Hijos de Numo es una novela de ciencia ficción, género favorito del actor y cantante. “La verdad es un campo muy cómodo para mí. Todo lo que he escrito desde niño ha sido a través de la ciencia ficción, creo que es una herramienta que me funciona y donde me puedo dar algunas licencias literarias para abordar ciertos temas”, explicó.
Schwebel considera que es importante darle mayor importancia y difusión a esta categoría. “Yo creo que debería haber más literatura fantástica y de ciencia ficción en nuestro país, al menos desde mi trinchera, este fue mi granito de arena y ojalá se abran puertas para diferentes escritores que quieran añadirle a este género”.
El nombre de su libro siempre lo tuvo claro, no dudó nunca en que ese era el correcto para comenzar su carrera como escritor, ya que Numo es una palabra que él ha adoptado como amuleto durante años. “Cuando mi hijo estaba chiquito tenía un amigo imaginario y decía que se llamaba Numo. Este nombre siempre ha sido para mí una especie de talismán o como augurio de buena suerte porque es algo con lo que recuerdo a mi hijo cuando era niño”, expresó.
El Chivo adelantó que ya se encuentra escribiendo lo que será la continuación de este primer proyecto, la
idea inicial es sacar una trilogía, aunque no descarta que puedan ser más libros. A la par, también ha comenzado a desarrollar una novela gráfica, sin embargo aún está en búsqueda del equipo que le ayude con las ilustraciones. “La historia es mucho más visual, está muy cargada de imágenes que si no se dibujan, son imposibles de explicar”, agregó.
Schwebel aún no sabe de qué manera sus fans recibirán este nuevo proyecto, ya que es una forma de mostrarse al público distinta a la que está familiarizado. “Me siento un poco raro porque creo que el input que voy a recibir de la gente es total y absolutamente diferente al de la música o el teatro donde tienes una interacción inmediata, cantas y te aplauden; aquí creo que este proceso será muy diferente y también muy interesante, pero estoy contento y entusiasmado.
“Ojalá que la gente conecte con mis locas ideas. Yo sé que en esta nueva aventura también voy a ir mejorando, tengo todo el respeto para la gente que estudió literatura, yo soy un fanático de la ciencia ficción, pero por supuesto, te puedo asegurar que los libros que vengan iré mejorando en técnica y en cosas que hoy acepto que carezco y sigo aprendiendo”, comentó.
Los Hijos de Numo está a la venta de forma digital desde el 31 de mayo en distintas plataformas y se podrá conseguir de manera física a través de Amazon a partir del 11 de julio.
Me gusta más escribir que cantar bailar”.