ACS y Ferrovial compiten por un histórico contrato
La promotora de la línea HS2 invita a las españolas a ofertar por la estación de Birmingham El proyecto supera los 18.280 millones
Los dos mayores grupos españoles de infraestructuras, ACS y Ferrovial, vuelven a verse las caras en el Reino Unido por un contrato singular y millonario. La promotora de la línea de alta velocidad HS2 ha invitado a las dos compañías a presentar presupuesto para la que será la primera gran estación urbana de ferrocarril, de nueva planta, construida en el país desde el siglo XIX: la terminal de Curzon Street, en Birmingham.
El plan maestro para levantar la infraestructura y regenerar 140 hectáreas en el entorno de la estación, con la previsión de 4.000 viviendas y 600.000 metros cuadrados de áreas comerciales, está valorado en 900 millones de libras (25.311 millones de pesos), de los que 650 millones de libras ( 18.280 millones de pesos) irían a la estación.
El grupo que preside Florentino Pérez comparece en el concurso en alianza con Mace, a través de la joint venture Mace Dragados, mientras que la compañía que lidera Rafael del Pino vuelve a utilizar la referencia BAM Ferrovial, empresa conjunta con BAM Nuttall. La tercera opción en liza es la británica Laing O’rourke Construction.
La puesta en marcha de este tipo de contratos en plena crisis del Covid-19, y tras la ejecución del Brexit, forma parte del plan que busca dar impulso a la reactivación económica británica. La línea HS2 nació presupuestada en más de 1,52 billones de pesos y ha ido disparando su presupuesto. En medio de un interminable debate sobre la sostenibilidad económica de la infraestructura, cuenta con el interés de las mayores constructoras de Europa, entre ellas las españolas. Tanto Ferrovial como ACS justifican su presencia en el Reino Unido en buena parte por el plan de la alta velocidad.
La estación de Curzon Street cuenta ya con el visto bueno a su planificación. Las constructoras se enfrentan al reto de crear una infraestructura neutra en emisiones de carbono y con diseño adaptado a un uso sostenible del agua y la energía, con sistemas de captura de agua de lluvias o casi 3.000 metros cuadrados de paneles fotovoltaicos. El diseño incorpora a la histórica estación de Curzon Street en uno de los vestíbulos del nuevo edificio, además de pensar en un intercambiador que conecte el tren de alta velocidad con el metro, trenes regionales y servicios de autobús.
Desde HS2 Ltd se habla de esta nueva estación como de un elemento transformador de Birmingham y un punto clave en la línea de alta velocidad. El diseño de la futura Curzon Street lleva la firma de los estudios WSP y Grimshaw Architects. Pese a tratarse de una instalación de nueva planta, sus techos recuerdan las cubiertas arqueadas de las estaciones de tren de la época victoriana, que ocupó buena parte del siglo XIX.
El ganador del concurso, cuya adjudicación se prevé en 2021, llevará a cabo el diseño de detalle y el proyecto de construcción. HS2 trabaja ya sobre el terreno y está previsto que a finales de año estén avanzadas las labores de desviación de los servicios públicos afectados por las obras.
Pugna por cada obra
ACS y Ferrovial han convertido su competencia en el Reino Unido en un hecho recurrente. Sus respectivas joint venture, Mace Dragados y BAM Ferrovial, ya se enfrentaron en 2019 por la construcción de la estación de Euston, también dentro de la línea HS2 y con un presupuesto de 1.650 millones de libras (46.404 millones de pesos). En el momento de la adjudicación, Euston era la sexta estación más transitada de Gran Bretaña, ofreciendo servicios de tren y metro. La instalación fue concebida para atender a 20 millones de pasajeros al año, menos de una cuarta parte de los 87 millones que recibió en 2018. En ese caso ACS se impuso a Ferrovial y al tándem formado por Costain y Skanska. La proyección de grandes estaciones para la alta velocidad en el Reino Unido también otorgó carga de trabajo el año pasado a la alianza en
Los dos grupos, con experiencia en la HS2, competirán con la local Laing O’rourke
tre Balfour Beatty, Vinci y Sistra ( se adjudicaron la estación Old Oak Common).
Ferrovial, por su parte, consiguió subirse a la construcción de la línea HS2 el pasado mes de abril. Fue con su entrada en el consorcio integrado hasta entonces por la francesa Eiffage y la británica kker para ejecutar obras por 2.269 millones de libras (64.572 millones de pesos. La española, acompañada una vez más por BAM Nuttal, comparte la construcción de 80 kilómetros (lotes C2 y C3) de la primera fase de la línea. Las obras incluyen la construcción de 15 viaductos, 22 kilómetros de desvíos de carretera, 67 puentes y 30 millones de metros cúbicos de excavación, entre otras tareas.
Este encargo se sumó a los trabajos previos de construcción de Ferrovial en el tramo central de la línea que unirá Londres y Birmingham. Esta última sección, que comienza al norte de la estación de Euston y llega hasta el Aeropuerto de Birmingham, tiene una longitud de 100 kilómetros. En ella, la filial Amey se encarga de ejecutar dos subestaciones eléctricas que apoyan la construcción del portal sur del túnel de Chilter.
Curzon Street será la primera estación urbana de nueva planta desde el siglo XIX