Inditex exhibe las capacidades de su modelo físico y digital en el nuevo Zara de la plaza de España
Abre su mayor tienda del mundo, con 7.700 metros cuadrados Permite adquirir prendas escaneándolas desde el móvil
Inditex ha abierto las puertas del proyecto más importante que ha acometido en años en su red física, en los que las absorciones de tiendas han ido ganando protagonismo frente a las aperturas. Se trata de los dos nuevos establecimientos de Zara y Stradivarius en la plaza de España de Madrid, en los bajos del Hotel Plaza Riu, en los que ocupará una superficie total de más de 9.000 metros cuadrados, entre espacio de venta y almacén.
Un proyecto, en especial el de la tienda de Zara, en el que el gigante textil gallego despliega todo su arsenal de recursos tecnológicos y exhibe las capacidades de su “modelo integrado”, es decir, la convivencia entre la venta física tradicional y la online, que ya supone el 25% de los ingresos del grupo.
El espacio cuenta con un total de 7.700 metros cuadrados construidos repartidos entre cuatro plantas y un sótano. De ellos, solo la mitad corresponden a superficie de venta. Inditex busca que sus grandes tiendas sean también enormes almacenes para el canal digital, algo que en plaza de España llega a su máxima expresión. “Gran Vía 84 es el máximo exponente del nuevo concepto comercial de Zara, basado en tiendas flagship amplias, renovadas y equipadas con las herramientas tecnológicas más eficientes”, explica la empresa.
La app es la base de las capacidades digitales del establecimiento. A través de ella se accede al nuevo servicio Pay & Go, que permite al cliente comprar las prendas escaneándolas con el móvil, solo teniendo que desalarmarlas en puntos específicos de la tienda. En este nuevo Zara también se sitúa, por primera vez, un buzón automático para devoluciones de prendas compradas a través de internet. Con la app y un código QR, el cliente deposita en una bandeja el producto
El grupo lo define como el “máximo exponente” de su nuevo modelo comercial
a devolver sin intervención de ningún empleado de la tienda. Algo parecido al área de recogida de pedidos online, presente en otras tiendas de Zara, pero que en este caso cuenta con un silo con capacidad para 1.500 pedidos. Lo adquirido llega al cliente en un plazo de entre 6 y 12 segundos, tras presentar, de nuevo, un código QR.
También con la app, con el modo tienda, se puede consultar en qué parte del establecimiento está la prenda deseada, reservar plaza en un probador o recoger un producto pedido a través de la misma en un espacio de 120 minutos. “La implantación de estas nuevas funcionalidades es un paso más en la estrategia de integración de tiendas y online del grupo Inditex”, dice la compañía, a través de su ecosistema tecnológico propio, bautizado como Inditex Open Platform.
Además de moda para mujer, hombre y niño, la nueva tienda también reserva un espacio para los productos de Zara Beauty, la línea de cosmética de la marca, que estrena mobiliario y que también cuenta con pantallas para probar de forma virtual los productos. En total, la tienda contará con 200 trabajadores.
Inditex pretende que, para cuando haya finalizado 2022, todos sus establecimientos en el mundo hayan integrado, en mayor o menor medida en función de las características de cada tienda, la estrategia del modelo integrado. Es por tanto de esperar que la tecnología de este nuevo buque insignia situado en Madrid se extienda por el resto de la red de Inditex.
La ‘app’ se convierte en el núcleo de la experiencia para el cliente digital