¿Que debe haber en el refrigerador?
No te olvides de tu refri, éste es un buen momento para reorganizarlo. De paso, estarás mejorando, sin proponértelo, tu alimentación.
Una de las mejores formas de tener un peso adecuado y saludable es reorganizando tu refri, pues cuando todo lo colocas donde sea, promueves “comer lo primero que tengas al alcance de tu mano”. Para una alimentación correcta, sigue los consejos de la nutrióloga clínica y del deporte Raquel Pérez de León. En un refri, no hay alimentos prohibidos, el punto es saber equilibrar nuestras comidas y “darnos permisos” de vez en cuando. Los postres, pasteles, gelatinas y más no son malos si los comemos en porciones adecuadas. El problema es cuando nos excedemos en azúcares y no hacemos ejercicio ( la actividad física ya no es una opción, ¡es fundamental!)
Para hacer este “detox de tu refrigerador" es mejor empezar haciendo pequeños cambios de manera gradual, sobre todo cuando se tienen hábitos muy arraigados. Sin embargo, según la doctora Pérez de León, “en mi experiencia en la consulta, modificar la dieta ( y por lo tanto la imagen del refri) “de un jalón”, puede costar trabajo las primeras dos semanas, pero los resultados en la calidad de vida son mucho más rápidos, y esto es una motivación para comer bien”.
¿SÍ O NO A LOS ALIMENTOS PREPARADOS?
Si vamos a comprar cosas ya preparadas o empacadas listas para refrigerar, debemos: · Revisar la fecha de preparación y de venta del producto, así como la fecha de caducidad. · Observar que el alimento esté realmente frío. Si no lo está o se está descongelando, no lo compres. · Si ya pasó el periodo de consumo o caducidad, es mejor ya no comerlo. · Leer la etiqueta de instrucciones sobre cómo preparar y almacenar el producto y seguir los pasos sugeridos. · Si hay algo que se quiera congelar, es mejor hacerlo lo más pronto posible, después de comprar el alimento. Si se descongela, tíralo, porque pierde su inocuidad.