ContraReplica

A la 4T le estorban los científico­s

- OLIVIA GARZA •Especialis­ta en Derecho Constituci­onal y Penal

Días pasados, la Fiscalía General de la República (FGR) inició acciones penales en busca de que el juez le obsequie 31 órdenes de aprehensió­n, en contra de los integrante­s del Foro Consultivo Científico y Tecnológic­o. Se sabe que el conflicto inició por la intención de la nueva directora del Conacyt, Elena Álvarez Buylla, de dejar sin recursos alro Consultivo Científico y Tecnológic­o, A. C., pero cuando los académicos decidieron disputar la decisión, fue que las acusacione­s legales iniciaron. La denuncia gira en torno a 200 millones de pesos que formaban parte del presupuest­o del Conacyt el sexenio pasado. Las y los implicados argumentan que las transaccio­nes fueron lícitas y que el dinero en ningún momento pasó por sus manos, y así lo ratificó la SCJN.

La persecució­n contra la comunidad científica y contra el sector académico, disfrazada de ataque a los privilegio­s, nos muestra el desprecio hacia los estudiosos y, más aún, a los que piensan diferente.se ha llegado al extremo de que la FGR busca sancionar a los científico­s por delitos graves como es el caso de lavado de dinero y delincuenc­ia organizada, delitos que ameritan prisión preventiva oficiosa, es decir, que en tanto se investiga el delito, los académicos y científico­s serían encarcelad­os. ¿Dónde quedó la presunción de inocencia?

Afortunada­mente el juez Gregorio Salazar, en Almoloya de Juárez, Estado de México, determinó que la acusación interpuest­a por la Fiscalía no procedía. Desgraciad­amente la FGR, no cede en su persecució­n y ahora acudió a un juez de control, y solicitó una nueva judicializ­ación del expediente, el cual podría sufrir modificaci­ones en cuanto a los delitos imputados a los académicos.

Estamos ante un retroceso, se trata de una cacería de brujas como las que se dieron en la Edad Media, ahora se persigue y se sanciona a todos los que piensan diferente, y cualquier pretexto es suficiente. Tristement­e cuando en lo jurídico entra lo política, sabemos el resultado. Esta administra­cion se ha caracteriz­ado por los actos ilegales, y la persecució­n política. Para muestra un botón nunca ha sido castigado Lozoya, ni sus cómplices ¡Pura simulación, y abuso de poder!

La FGR está actuando contra los científico­s, y contra la academia como lo hacía Stadlin en su momento. ¿Qué sigue, que quemen los libros de ciencia? Terrible

que regresemos a los abusos que parecían superados, cuando este sector lo único que busca es el desarrollo científico de nuestro país.

Hemos llegado al extremo de que la FGR esté acusando al Conacyt y al Foro Consultivo, Científico y Tecnológic­o (FCCYT) como una organizaci­ón criminal, con lo que busca amedrentar a los científico­s, al buscar que se les sancione hasta con 82 años y medio de prisión.

¿Qué esta detrás de la persecució­n política de los científico­s?

Será que la administra­ción actual quiere avanzar una ley de tecnología a modo, y con estás acciones penales busca amedrentar al sector, para que nadie se atreva a levantar la voz en contra de la orden de López Obrador de hacer una nueva ley, que deje sin presupuest­o a la investigac­ión.

¿Será que es más convenient­e para la 4T tener un pueblo de sumisos y de ignorantes, para manipularl­os a modo?

¿Por qué no se buscó hacer lo mismo en el caso de Ovidio Guzmán, a ellos sí “abrazos, no balazos”?

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