‘Busquemos la paz’
Llama Obispo de Celaya a reconstruir sociedad y buscar la paz anhelada, “es trabajo de todos” Acude a misa en el sur del municipio, donde en dos meses 35 personas han sido asesinadas
El obispo de Celaya, Benjamín Castillo, estuvo presente en la misa por la paz a la que asistieron más de 200 personas en el restaurante Los Tres Hermanos, el cual fue quemado y donde dos hombres murieron el 25 de septiembre, en la comunidad de La Cruz.
“Pedimos por las personas que han muerto, hace unas semanas, que toda esta región sufre constantemente”, dijo Benjamín Castillo y es que, en dos meses, 35 personas han sido asesinadas en las comunidades del sur de Celaya.
Por todo eso, la noche del miércoles vecinos de La Cruz y comunidades vecinas asistieron a la misa en el estacionamiento del restaurante.
“Ha muerto mucha más gente por los crímenes que por el coronavirus, a lo mejor no en el mismo espacio, pero ¿cuántos han muerto en un año en Guanajuato?, yo creo que aquí en la ciudad muchos más de los que han muerto por la pandemia”, explicó el Obispo.
La eucaristía fue encabezada por el rector del templo de La Cruz, Vidal Rodríguez Turrubiate. Al finalizar, el obispo Benjamín Castillo Plascencia pronunció su mensaje en el que pidió por las víctimas y victimarios para que Dios les conceda el arrepentimiento y la conversión.
“La invitación es a buscar la paz, poner nuestra confianza en Dios, no buscar la venganza, es algo muy importante. Todos los domingos de manera especial pedimos por la salud, por todos los que mueren por la pandemia, pero más por los que mueren por
“Ojalá nos comprometamos a eso, a ser menos violentos, de manera que la siguiente generación con el testimonio de ustedes, sea menos violenta, es cierto que la violencia engendra violencia, ningún problema se soluciona por la venganza”
Benjamín Castillo Obispo de Celaya
la pandemia de la violencia, muchísimos y pedimos también por los victimarios.
“Quiero invitarlos a poner confianza en Dios, pedir que les de la paz, la paz es un regalo de Dios, pero también una tarea nuestra, desde hace mucho tiempo trabajamos por hacer que se vaya restableciendo el tejido social… nuestra sociedad es como una tela desgarrada, deshilachada y tenemos que reconstruirla”, dijo.
Aseguró que “la violencia es como una gran pirámide y la cúspide está en esa gente que se dedica a matar, a descabezar y a descuartizar, pero la base somos casi todos y me sumo también yo”.
“¿Cuántas veces porque alguien se nos atraviesa y no respeta las reglas de tránsito somos capaces de enojarnos y reclamar violentamente?, ¿cuántas veces en la familia hay respuestas y actitudes agresivas? y así va refinando para arriba, hasta que llega a algunos de manera especial muchos jóvenes”.
Insistió en que toda la sociedad debe trabajar por la paz “desde nuestro corazón, desterrar nuestra violencia, comenzar por nosotros y por nuestra casa, que los hijos no sufran la violencia y se formen violentos en su casa”.
Quieren ser narcos
El Obispo habló de los niños que quieren ser narcos, que ven como un ideal tener ganancias desorbitadas, vehículos, “que quieren dedicarse a quitar a la vida a otros… y estamos viendo las consecuencias”.
Dijo a los presentes que deben perdonar como el sacerdote lo dijo en su homilía: “la actitud de Cristo es la que tenemos que tener, perdónalos, perdónalos, acuérdense, no sólo hay que amar a los cercanos, sino a los que nos persiguen, es la actitud de Cristo”.
Por ello llamó a los asistentes a pedir por las víctimas pero también a sobreponerse a la violencia y luchar por construir una mejor sociedad.
“Hablaban de una comunidad dañada por el miedo, creo que se tienen que levantar y decir, vamos a reconstruir esta sociedad y vamos a comenzar por nosotros mismos, por mejorar nuestra familia, que se mejore el barrio”.
Los asistentes acudieron a la misa vestidos de blanco y con una veladora para pedir por la paz en la zona.