‘Como de película’ tener coronavirus
Karla es una joven de 26 años, hace un par de meses se contagió de la COVID-19 en Acámbaro, afortunadamente logró vencer al virus.
“Desperté un día y presentaba síntomas que coincidían con la COVID-19: dolor de cabeza, dolor de huesos, dolor de garganta y tos seca, algunos de estos síntomas ya los tenía desde un par de días pero esa mañana los síntomas eran muy fuertes y evidentes. Tenía que ir a trabajar pero creí que lo más responsable que podía hacer era acudir al Hospital General para que me realizaran la prueba.
“Decidí ir sola hasta el hospital, me puse cubrebocas, guantes y durante el camino lo único en lo que podía pensar era en todas las personas con las que tuve contacto días antes, me preocupaba haber contagiado a alguien más. Al llegar a las rejas del hospital vi que había mucha gente cerca así que me retiré varios metros hasta llegar a la parte de la reja donde había un guardia de seguridad, le comenté lo que pasaba y me hizo ponerme gel antibacterial antes de entrar por un camino especial para COVID-19, el camino estaba marcado por círculos verdes hasta llegar a un espacio especial para atención de personas que presentan síntomas y se hacían la prueba”.
Mencionó que cuando llegó no había nadie atendiendo, solo una señora de limpieza, quien le comentó que la doctora llegaría en cualquier momento.
Minutos después llegó una enfermera y a lo lejos comenzó a hacerle algunas preguntas sobre sus síntomas, “le respondí, se fue y regresó con una doctora, ambas con equipo de protección para hacerme las pruebas”.
“Me hicieron la prueba metiendo un hisopo muy largo por mi nariz y otro por la garganta, también me hicieron una prueba de sangre y una placa, la persona que me hizo la placa parecía muy asustado, como si fuera la primera vez que lo hacía, trataba de estar lo más alejado de mí e incluso yo tuve que colocarme algunos cables sola”, dijo Karla después de hacer una pausa.
Comentó que todo el proceso se sintió como una película, con gente con equipo protector a la que apenas se le ven los ojos, algunos temerosos de acercarse.
“Finalmente me pidieron regresar a mi casa y aislarme mientras los resultados llegaban, tardaron cerca de 1 semana en darme resultados”, dijo.
A la semana siguiente llegaron los resultados donde le indicaban que había salido positivo, pero gracias al apoyo de su familia, quienes estaban muy preocupados por su salud, salieron adelante, pues tomaron las medidas necesarias como el aislamiento, uso de cubrebocas, aplicación de gel antibacterial y lavado de manos.
“Gracias a dios logré salir de este terrible virus, a pesar de que siempre me cuidé, no supe en qué momento me contagié”.