La vida de las abejas
¡Saludos ejemplares! Deseo empezar la columna con una frase atribuida a Albert Einstein: “Si las abejas desaparecieran del planeta, al hombre le quedarían solo cuatro años de vida”. Enseguida para qué vean ustedes qué calidad de lectura estoy recomendando, les escribo lo siguiente: El libro fue editado por vez primera en 1901. Su autor es Maurice Maeterlinck que fue Premio Nobel de Literatura en 1911. Otros datos del autor son: obtuvo su título de abogado, pero no ejerció su profesión más bien fue un apasionado apicultor que observó con toda la paciencia, el mundo de las abejas y desde entonces intentó alentarnos sobre lo importante y decisiva relación de esos insectos pequeños en el equilibrio ecológico de nuestro planeta. Más allá de esta rotundidad lo cierto es que el mundo social de las abejas es uno de los más apasionantes e instructivos que existe. Ha servido de modelo para los sociólogos, para los arquitectos y todavía los químicos, los biólogos, los físicos y otros investigadores no han descubierto los milagros que estos pequeños insectos realizan. Maurice cuando decidió estudiar este fascinante mundo, observa con paciencia durante muchos años la vida dentro y fuera de la colmena, estudia la creencia de las abejas, recorre sus caminos y se queda asombrado de sus misterios. La vida de ese reino está siempre presidida por una reina, que el autor señala con respeto y cortesía: trata de entender sus costumbres, su trato con otras abejas, su lujo de reina, sus privilegios tiránicos, sus vuelos nupciales y también su muerte. Todas estas etapas están descritas con meticulosidad y con un criterio de un científico. En Maeterlinck convergen varias cualidades, unas son de científico, otras son de filósofo, otras como poeta y otras como literato. Así nos muestra secretos sorprendentes de ese mundo regulado y perfecto y logra que los que leen esta apasionada historia, puedan comprenderla con cierta facilidad. Captaremos cómo es la vida de estas criaturas casi humanas y lo sobresaliente, poseídas por un sentimiento muy profundo del deber. El libro ya está clasificado por haberse ganado ese honor como un libro clásico. Ahora les entrego una relación de los capítulos del libro para que podamos notar qué estudio tan meticuloso realizó el autor, estudio que seguramente le llevó años y solo fue posible esa dedicación que él vivió con pasión, su sueño de investigar hasta donde le fue posible, ese maravilloso mundo de las abejas. Primero explica lo que pasa a las “Puertas de las colmenas”. Luego detalla “Qué es el enjambre”. Nos explica luego “Cómo se funda una colmena”. En el siguiente capítulo que es el cuarto nos describe “Cómo viven las reinas jóvenes”. En el capítulo siguiente describe con lujo de detalles “La importancia del vuelo nupcial”. En el siguiente capítulo describe cómo y por qué se lleva acabo
“La matanza de los zánganos”. Y finalmente escribe un sencillo ensayo “Sobre el progreso de la especie”. Como todo buen libro científico escrito por cualquier autor siempre presentan los libros en los cuales se documentaron y nos presentan una relación de ellos. Algunos de estos libros con el tema de las abejas hacen mención de Aristóteles, Varrón y Virgilio y desde luego, cita por lo menos a diez autores modernos que han tratado la vida de las abejas. Señala además para los interesados de la apicultura práctica veinte autores y recomienda algunas monografías generales (doce) y especializadas otras treinta. Todas estas obras o artículos están escritos en inglés, o en francés o en alemán. Un dato que quiero resaltar es que probablemente le llevó noventa mil horas de lectura y seguramente estas horas fueron de observación y yo estoy suponiendo que llevó más de treinta años de su vida. Leamos unos cuantos renglones de su estilo descriptivo: “No exagero cuando hablo de tan sorprendente y loca prodigalidad de la naturaleza. En las mejores colmenas se cuentan habitualmente cuatrocientos o quinientos machos. (O sea zánganos), lo curioso es que son tragones y el trabajo incesante de cinco o seis obreras apenas basta para alimentar ese ocio voraz de cada uno de estos parásitos y otra curiosidad es que solamente uno participa en el momento nupcial”. Nos leeremos en la próxima. El Pilón Filosófico: “Es triste que el pueblo mexicano en su mayoría, no ha descubierto la belleza literaria, por no tener el hábito de la lectura”.
Título: La vida de las abejas
Autor: Maurice Maeterlinck
Editorial: Ariel
Precio: $ 269