EVENTOS CANCELADOS, MÁS GOLPES A LA ECONOMÍA: ¿OTRO RESCATE EN PUERTA?
Los datos sobre la pandemia por Covid-19, pero sobre todo las decisiones que asumen los gobiernos a la defensiva ante el avance de la misma, ofrecen una doble vertiente para entender el momento que atravesamos.
La primera, que las autoridades, por lo menos en Guanajuato, reaccionan con lógica ante el momento. La cancelación del Festival Internacional Cervantino en el estilo que lo hemos conocido en los últimos 30 años, confirmada ayer, es muestra de ello.
Una decisión dolorosa pero inevitable. No hay mucho tiempo para lamentaciones porque están en revisión otros eventos que tendrán que recibir el palomazo o el tache, el más importante por el número de visitantes y la derrama económica es el Festival Internacional del Globo.
Los organizadores y las autoridades están en una fase en la que se resisten a cancelar un evento que genera decenas de miles de visitantes y una de las derramas económicas más importantes en la región.
Y ese es el punto delicado. Para efectos de impacto económico, lo de ayer es una cancelación. El sector hotelero, los restaurantes y la cadena que tiene que ver con el turismo en la capital del estado resentirán un golpe severo y en León, los promotores del FIG estiran la liga porque quieren evitar un anuncio similar.
Y lo que enfrentan es un escenario complicado. La decisión deben tomarla ya y optar por el sí, implicaría de entrada un costo mediático. Mantener un evento masivo en las actuales circunstancias no es algo muy popular.
Los que ponen sus barbas a remojar también ya son los organizadores de la Feria de León que se celebra desde mediados de enero hasta principios de febrero.
En el FIG parece que es algo más complicado pero en el caso de la Feria, la alternativa podría ser diferirla porque es a principios de año y hay margen de maniobra.
Pero, más allá de estas decisiones coyunturales, la permanencia del semáforo en rojo y la preocupación de las autoridades para que no se convierta en un problema la ocupación hospitalaria, han obligado a dejar la reapertura económica en un segundo plano durante las últimas semanas.
La mayoría de los negocios, independientemente de su extracción esperaban que ya a estas alturas, la pandemia estuviera en su fase de salida y no. Hay restaurantes y negocios de diversa extracción que están al borde de la quiebra o de plano ya cerraron.
Frente a este panorama, los créditos que se otorgaron en dos tandas en el estado cada vez sabrán a casi nada hasta diluirse. En otras palabras, será necesario un nuevo plan de rescate de la economía estatal o de plano, el cierre de este 2020 será el del inicio del recuento de los daños.