Se pierden recursos para parque ladrillero
Gobierno estatal había destinado el dinero para la instalación de un horno amigable con el ambiente
El municipio perdió los recursos estatales que hace 5 años había logrado para el parque ladrillero, por no concretar el predio que alojaría el moderno prototipo amigable con el medio ambiente y redituable para los productores. María Isabel Ortiz Mantilla, titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial, (SMAOT), aseguró que apoyarán para que se concrete el proyecto.
Irapuato junto a otros municipios guanajuatenses como Abasolo, Salamanca y León, se destacan por la producción ladrillera, pero los procesos tradicionales que los productores realizaban para continuar con el oficio no eran los más amigables al medio ambiente, por el uso de combustibles y las altas emisiones contaminantes que despedían.
Hace 5 años, investigadores y alumnos de la Universidad de Guanajuato, (UG), realizaron un prototipo de un horno amigable con el medio ambiente, que agilizaría la producción de ladrillos, sería más redituable para los productores y menos nocivo para la salud.
En aquel entonces se requería de una inversión de entre 6 y 7 millones de pesos para llevar a cabo el prototipo, el 70% de los recursos los aportó el gobierno del estado y el porcentaje restante el municipio y los productores ladrilleros, pero no se pudo concretar un terreno para alojar el nuevo horno e Irapuato perdió la inversión estatal.
Luego de 5 años podría concretarse el parque ladrillero, para lo cual se necesitaría una inversión de al menos 6 millones de pesos. El proyecto planea mejorar las condiciones laborales de los productores y cuidar el medioambiente.
“Había un recurso asignado a la Secretaría de Desarrollo Económico Sustentable en su momento y bueno pues se hizo todo el proceso, lamentablemente no se logra aterrizar que fuera en ese año que se pudiera ya instalar (...) Sin embargo nosotros seguimos en la búsqueda para poder garantizar que se pueda contar con los recursos”, dijo Ortiz Mantilla.
Señaló que Irapuato tiene una ventaja respecto a otros municipios porque el proyecto se socializó y a la fecha los productores ya están conformados en una cooperativa, lo que implica la agilidad del proceso.
“Una de las cosas más complicadas es la parte social e Irapuato ya la tiene porque ya están articulados como una cooperativa, cuando tienes diversos grupos cuando socialmente no trabajan juntos es mucho más complejo porque entonces ellos están acostumbrados de alguna manera a que sea un horno por persona o por familia y eso es muy complejo”.
El municipio ya había identificado un predio cercano a una zona industrial, pero los empresarios instalados en la zona se opusieron al horno productor de ladrillero porque creyeron que afectaría a las plantas y trabajadores por la alta emisión de contaminantes.
En enero de este año, el director de medio ambiente, Gonzalo Guerrero, compartió que se tenían dos propuestas de terreno para alojar el proyecto, pero no se ha concretado ninguna alternativa.