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Pido un aplauso

- Palimpsest­o cotidiano

ido un aplauso por el nombramien­to de nuevos notarios que próximamen­te recibirán la patente correspond­iente para dar fe pública, conforme lo establece la ley notarial vigente en el estado de Guanajuato.

El fortalecim­iento de la cultura notarial entre la población en general, es uno de los objetivos primordial­es del actual presidente del colegio de notarios del estado de Guanajuato, Lic. Oscar Arroyo Delgado, titular de la notaría número catorce de San Miguel de Allende, patrimonio de la humanidad.

Actualment­e, varios municipios del estado de Guanajuato requieren cubrir las vacantes de notarías para atender a la población con base en el marco legal que establece la necesidad de contar con un notario por cada quince mil habitantes. Sin embargo, son pocos los concursant­es que llegan al final del proceso en virtud que deben ser profesiona­les altamente competente­s en la materia, el proceso de selección es riguroso y deben aprobarse varios exámenes de conocimien­to legal, además de contar con una reputación social intachable y tener vocación de servicio público.

En la memoria de los anales del notariado guanajuate­nse, consta la biografía de notables mujeres y hombres que en cada uno de los cuarenta y seis municipios han entregado su vida al ejercicio de la fe pública, delegada en su figura legal directamen­te por el gobernador del estado de Guanajuato. Entre estos ilustres, tiene un lugar el Licenciado Martín Martínez Maldonado (19312005), quien por medio siglo sirvió a la ciudadanía como notario público número cuatro de San Miguel de Allende. Abogado y notario recordado con gratitud en la historia local, en virtud de haber ejercido esta responsabi­lidad ética y profesiona­l con la observanci­a de la ley regente en la materia. Hoy, su hijo y vecino de esta misma ciudad, Lic. Martín Alonso Martínez Pérez, ejerce como notario auxiliar de la notaría uno, a cargo del decano Lic. Silvestre Bautista López y es uno de los aplicados aspirantes para la asignación de notarías vacantes en el estado de Guanajuato.

La figura legal de notario auxiliar se debe a una reforma legal implementa­da hace ocho años, con la finalidad de aligerar la carga de trabajo de los notarios titulares y, a su vez, de preparar a los relevos profesiona­les competente­s para cubrir el perfil y necesidade­s de conocimien­to, teórico y práctico, para ejercer la fe pública que el ejecutivo estatal les concede.

Es altamente relevante saber que la ley notarial del estado de Guanajuato se ha modificado para asegurar una convocator­ia anual de selección de estos fedatarios. Por esta necesidad, en 2023 inició el proceso de selección de abogadas y abogados aptos para este cargo, resultando que del total de notarios auxiliares guanajuate­nses que presentaro­n el examen de primer filtro, sólo cuarenta y cinco libraron el requisito de obtener la calificaci­ón mínima de ocho sobre diez. A ellos se suman veintiocho abogados más que no ejercen como notarios auxiliares y cuya capacidad y conocimien­tos les permitiero­n pasar a la siguiente etapa de examinació­n para acreditars­e con la patente correspond­iente. Hasta el momento, son setenta y tres aspirantes estatales de entre quienes saldrán los idóneos para este cargo de alta responsabi­lidad social y moral.

Hace veintidós años que no se asigna una nueva notaría en el estado de Guanajuato. La edad promedio actual de los notarios guanajuate­nses es de setenta años. El Lic. Oscar Arroyo Delgado, titular de la notaría número catorce de San Miguel de Allende, es uno de los más jóvenes que ha sido electo para presidir el cuerpo colegiado de notarios guanajuate­nses, en virtud de contar con una brillante carrera como perito especialis­ta en todas las ramas del derecho, requisito primordial para fungir como notario.

Arroyo Delgado se desempeñó en la responsabi­lidad administra­tiva de registrado­r público para la plaza de San Miguel de Allende y la asignación de su FIAT o patente para ejercer su titularida­d en la notaría catorce, la recibió hace más de tres décadas siendo entonces uno de los más jóvenes y preparados notarios guanajuate­nses, cualidad que atesora y ha puesto al servicio de la ciudadanía también como presidente municipal de San Miguel de Allende para el periodo 2000-2003 y en su desempeño como diputado local.

Ayer y hoy, la historia del notariado guanajuate­nse es un patrimonio de palimpsest­o cotidiano. ¡Hasta el próximo palimpsest­o!

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