LA CONTIENDA EN CUÉVANO SE EMPANTANA
Lo que se preveía se cumplió. La contienda por la alcaldía de Guanajuato capital se ha tornado cruenta con una especie de acuerdo no escrito en el que el candidato de Morena, Jorge Antonio Rodríguez Medrano, es el blanco común de descalificaciones, denuncias y acusaciones, sin una sola herramienta para defenderse.
Y no es que el abanderado morenista no sea merecedor de toda esa andanada de señalamientos. De hecho, como escribimos hace unos días en este espacio, la toxicidad del empresario televisivo era ya pública y notoria. Postularlo irremediablemente tendría un costo político perfectamente identificable con las preferencias por la marca, versus, la intención de voto que realmente suma.
Pero todo este linchamiento político no se podría volver crisis sin la respuesta que se le ha atribuido a propio Rodríguez Medrano y su familia. Mensajes con rencor y hasta con la presunción de un escándalo han llegado al equipo de campaña de la candidata del PAN, Samantha Smith Gutiérrez, quien justo denunció públicamente las amenazas.
A lo anterior habría que sumarle la voluntad de un candidato del Partido Verde como Roberto Saucedo Pimentel, quien ha manifestado que no cesará en exhibir los abusos de Rodríguez Medrano como el objetivo primordial de su campaña, mientras la candidata del PT, Paloma Robles Lacayo, se sumó a las denuncias de violencia política de género en contra de empresario.
Así que en la recta final de las campañas, en Guanajuato capital todo puede pasar. Existe el conflicto y los conflictuados. Lo peor está por venir.