EMPRENDEDORA GLAM

“El mayor obstáculo está en la cabeza de cada uno de nosotros, cuando ponemos la etiqueta de ‘imposible’ a cualquier cosa”.

Solía tener un cosquilleo interior que no la dejaba dormir; era ese mensaje que le demandaba hacer algo más con lo que amaba. Ruth, quien estudió diseño de modas y enseñó técnicas de ilustración por más de nueve años, además de ser ama de casa, nos cuenta cómo se decidió a emprender: “El diseño es parte de mi ADN. Nunca lo hice a un lado, solo llegó el momento en que me costaba no dejar salir esto que ardía en mi interior y no paré hasta empezar con esta aventura que se ha convertido en uno de los retos más exigentes en mi vida”. Así comenzó con Iconique en el 2013, una marca de joyería que utiliza la herencia artesanal de México en la platería y la interpreta de forma novedosa.

El mejor consejo que le dieron a Ruth para atreverse a emprender –y que ahora nos comparte– fue perder el miedo y comenzar con su visión: “En realidad, nunca tendrás la seguridad de si estás haciendo lo que amas o si es lo correcto, hasta que lo hagas... y déjame decirte otra cosa, he aprendido a reinventarme, ser disruptiva y nunca dejar de aprender”. Como todo, la creadora de Iconique reconoce que emprender es un proceso que lleva tiempo: “Invierte tu tiempo en aprender. Pide consejo a quien es experto, nunca dejes de preguntar. Equívocate, retoma el camino, avanza y nunca digas ‘no se puede’. Siempre hay un sí cuando arde en ti tu pasión”, termina.