TIPOS DE PIEL
Como mencionan las doctoras, conocer tu tipo de piel es el primer paso esencial para establecer la mejor rutina de skincare para ti. Te compartimos las descripciones que nos dio Rosa María de los distintos tipos para que identifiques la tuya, aunque siempre es mejor corroborar con un especialista, ya que puedes pensar tener un tipo y no estar en lo correcto.
PIEL NORMAL
Es el tipo de piel más equilibrada, ni demasiado seca, ni en extremo grasa. Principales características: buena circulación sanguínea, textura suave y lisa, ausencia de impurezas, poros finos y no es propensa a la sensibilidad. Todo esto hace sencillo seleccionar los productos correctos para ti; deben contener ácido hialurónico, retinol, urea pura y antioxidantes. Lo más importante: mantén la constancia en tu rutina de cuidado y conservarás tu cutis bastante sano.
PIEL MIXTA
Se caracteriza por desarrollar exceso de grasa, la aparición de puntos negros y poros abiertos en la zona T (frente, mentón y nariz), así como presentar descamación, sequedad o falta de luminosidad en las mejillas. La recomendación de las expertas es utilizar productos que contengan ácido láctico y dentro de lo posible, tratar cada zona con un producto diferente para evitar que las áreas secas se resequen más y las grasas, tengan el cuidado correspondiente.
PIEL GRASA
Se distingue por el brillo permanente en la cara, la aparición frecuente de puntos negros, generalmente en la nariz, y los poros abiertos. Entre los productos específicos que existen para este tipo se encuentran los geles o espumas limpiadores, geles exfoliantes e hidratantes que contengan ácido salicílico y ácido láctico para ayudar a disminuir y controlar el exceso de grasa y brillo.
PIEL SECA
Es áspera, escamosa, deslucida, enrojecida y en ocasiones causa una sensación de picazón o molestias. Lo ideal es tratarla con productos exclusivos para piel seca, con ácido hialurónico, urea pura y ceramidas; hidratarán sus capas más profundas y le darán una apariencia más saludable.
PIEL SENSIBLE
Tiende a irritarse fácilmente frente a diferentes factores externos y durante la aplicación de productos no adecuados. Los tratamientos recomendados son dermolimpiadores y cremas corporales con ingredientes suaves como Aloe Vera, manteca de karité y ácido hialurónico que regulen el pH, prevengan la irritación, inflamación y el riesgo de alergias.
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