El CPTPP no funciona sin política industrial
Los ejes conceptuales de las políticas nacionales están cambiando en el capitalismo contemporáneo, y sucede, por la incapacidad del modelo económico de generar inclusión, movilidad social y prosperidad para todos. El retorno a la ideología nacionalista y sus instrumentos tradicionales de política como el proteccionismo, la sustitución de importaciones, el control de cambios y fuerte presencia del gobierno en el desempeño económico, simplemente son irrepetibles y lo que observamos en realidad es una nueva generación de estrategias nacionalistas y geopolíticas.
No es casual que estemos frente a los neonacionalismos separatistas europeos, o las confrontaciones en el mundo árabe, o que aquí en América del Norte contemos con las políticas de Donald Trump que sincroniza su agenda con asuntos globales para lograr más republicanos en el congreso y el senado, así como apoyo de su base electoral para radicalizar posturas y mediante la retórica mover mercados, además de la opinión pública.
El neonacionalismo nace entonces como una respuesta reactiva a la desigualdad y el crecimiento de la pobreza en el mundo desarrollado, un neopopulismo que exacerba la deficiencia y corrupción de la clase política y que postula un pragmatismo que pone en jaque instituciones globales. El libre comercio entonces viene a cuento ante este ostracismo, dado que será a través de acuerdos de bloque, tratados comerciales y estrategias bilaterales que se podrá capitalizar una estructura de mercados abiertos si pero siempre acompañados de políticas industriales que disminuyan las asimetrías económicas y consideren las distorsiones nocivas que genera la competencia desleal.
El nuevo CPTPP que incluye Australia, Brunei, Canadá, Chile, Malasia, Japón, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam tiene como principio “contribuir al crecimiento económico y crear nuevas oportunidades para empresas, trabajadores, agricultores y consumidores”.
Primero habría que entender que la Secretaria de Economía siempre señaló que la única razón por la que habría que entrar a el TPP original era por ser una estrategia para no ceder más nuestros espacios comerciales con el mercado norteamericano, donde habrían de entrar 10 jugadores a disputarse el mismo mercado.
Y recientemente que Canadá logró resolver sus diferencias con Japón y se reactivó ahora bajo el nombre de CPTPP se plantea como un mecanismo de presión geopolítico estratégico, lo cual dudo que influya en el ánimo del presidente Trump y lo que hoy puede ser una modesta palanca de apoyo político para negociar , mañana se puede convertir en el plan B para desmantelar y deteriorar sectores productivos estratégicos
Otro tema fundamental es entender que la oportunidad que nos representan esos países para vender productos es insignificante y no porque sean mercados pequeños sino más bien porque son mercados muy integrados regionalmente y el país dominante sobre todos ellos es China, así que las ventajas de la materia prima barata, los subsidios al financiamiento, a la energía, a las exportaciones , la política intervencionista de empresas de estado, las barreras de protección de sus mercados estratégicos ahora se usan como base para complementarse con el bajo costo de mano de obra vietnamita para atentar con acabar con la industria del calzado, textil y vestido, que ya llevan muchos tratando de defenderse de este país sin tratado.
O el potencial de las industrias de Malasia con el sector de insumos para la salud y equipos de diagnóstico que con sus grandes productores de látex habrán de poner contra las cuerdas a una industria de dispositivos médicos nacional que va en ascenso , o los modernos sistemas de producción de la industria petroquímica de Singapur donde la tasa de Impuesto sobre la renta es entre 0 a 20 por ciento serán un factor para desincentivar las inversiones en productos petroquímicos como la familia de productos aromáticos y plásticos que en los últimos años han abonado a la desindustrialización de nuestro país.
Podríamos seguir hablando de cientos de sectores como el sector mueblero particularmente los de Rattan y Recreativos , la Teka. El sector de autopartes, la remanufactura de productos asiáticos triangulados a través de países con mano de obra en condiciones esclavizantes y exportados por los paises del TPP, el sector lácteo frente a los paises de Oceanía, ente otros. Seguramente como en todo tratado pueden encontrarse modestos nichos de mercado como la ampliación del comercio de productos agroindustriales particularmente con Japón , sin embargo, este poderoso sector no depende de ello para su supervivencia y seguirá creciendo en muchos otros mercados como el de los paises árabes y Europa.
Si México no ha podido detener el avance de China frente a países con los que tenemos tratados entonces este acuerdo lo único que habrá de provocar es empeorar nuestra balanza comercial e incrementar nuestro déficit frente a Asia.
En todos los instrumentos comerciales actualizados o revitalizados aparece el tema de derechos humanos y responsabilidad social, el comercio electrónico, el desarrollo de las PYMES y las empresas de telecomunicaciones.