Juzgan a 6 germanos por tráfico de armas
Legislación alemana prohíbe que fusiles fabricados en su país vayan a zonas en conflicto; cuatro mil 796 fueron a Guerrero
BERLÍN, Alemania.- Seis exempleados del fabricante de armas alemán Heckler & Koch (H&K) comparecieron ayer ante un tribunal por la venta ilegal de miles de armas a México.
Al comienzo del juicio, en Stuttgart, militantes de derechos humanos manifestaron delante del tribunal denunciando que las armas en cuestión pudieron haber sido utilizadas en la masacre de 43 estudiantes mexicanos en el año 2014.
Según la acusación, los sospechosos sabían que las armas terminarían en los estados mexicanos más afectados por la violencia, lo que la licencia de exportación prohibía formalmente. La legislación alemana sobre el control de armas prohíbe que las armas fabricadas por las empresas nacionales sean entregadas en zonas de conflicto. Según la prensa alemana, el ministerio de Defensa mexicano aprobó la compra de nueve mil 652 fusiles HK, de los cuales cuatro mil 796 terminaron en estados como el de Guerrero, azotado por la corrupción y la violencia de los cárteles de droga.
Según los militantes por los derechos humanos, los fusiles HK G36 fueron enviados a la policía de Iguala, una ciudad de Guerrero donde seis estudiantes murieron y 43 desaparecieron en septiembre de 2014.
"Los que autorizaron esas exportaciones de armas (...) son cómplices de asesinato", declaró
uno de los militantes, Jürgen Grässlin, al canal de televisión regional SWR.
Los acusados son sospechosos de haber vendido entre 2006 y 2009 miles de fusiles de asalto automáticos infringiendo la legislación alemana sobre venta de armas a zonas en conflicto por el mal uso que se les pueda dar.