¿No más rechazados?

En campaña fue claro el pronunciamiento del ahora presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador.

No habrá más jóvenes rechazados en las universidades públicas. No más sueños de la juventud de escasos recursos quebrados, hechos polvo por el mismo gobierno que no amplía la infraestructura en las universidades públicas del país, en donde ya es hora de hacer a un lado lo menos prioritario, incluso superfluo, para atender los justos reclamos de los jóvenes para estudiar una carrera.

Hoy 15 AMLO se reunirá con rectores de las universidades de México para analizar la cobertura universitaria. Seguramente les advertirá (por si no se han percatado) de los nuevos tiempos para la educación superior al alcance de los hijos del pueblo. No más rechazados fue la promesa. ¿Llegará la hora de cumplir?

ACABARÁ EL LUCRO CON LA POBREZA. Los programas sociales continuarán con una importante modificación: Se les alejará del uso político, el trueque, favores a cambio de ir a mítines o de la credencial de elector. Es decir, los apoyos para personas que lo requieren ya no serán obligados a canjearlos por credenciales de elector. RESPETO A LA DIGNIDAD HUMANA. Tampoco habrá despensas a cambio de votos o la obligación de pertenecer al partido político que otorga esos beneficios ni tendrán que acudir a fuerza a plantones o marchas. Se apoyará sin chantajear a la gente que lo necesita. Éste será el cambio sustancial en toda la materia social de los programas existentes, que se modifiquen o se vayan a crear. Palabra de AMLO.

ENTRE PARÉNTESIS. ALEJANDRO Encinas aclaró “paradas” sobre el tema de los superdelegados y subdelegados: “Los delegados tienen que actuar con mucha responsabilidad y con respeto a la autonomía del gobierno de los estados, que son libres y soberanos, y entender que son un vínculo entre la Presidencia de la República y los gobiernos locales, para agilizar los programas (...) Se tiene que evitar el uso político, con la fiscalización y el control, tienen que actuar con ética y responsabilidad y estar sujetos a la fiscalización”.