La boca: un mundo desconocido
Bacterias, virus y hasta hongo, lo que se "hospeda"
Bacterias, virus y hasta hongo, lo que se "hospeda"; científicos advierten sobre afectaciones a la salud.
Desde que salen los primeros dientes, los padres siempre “nos atormentan” con que hay que lavarse los dientes después de cada comida. Sin embargo, desconocemos el resultado de no seguir su consejo. Tal vez si nos dijeran que las bacterias malas crecen en nuestra boca y que una forma de combatirlas es cepillándose los dientes, entenderíamos mejor, sería un buen argumento, y alegremente les haríamos caso. ¿Por qué es importante saber esta historia?
Dentro de nuestra boca, o cavidad oral, existen comúnmente diversos microorganismos, como son bacterias, hongos y virus. Las bacterias son las más abundantes. Los científicos han reportado que el desequilibrio entre los diferentes tipos de microbios podría afectar a la salud de los humanos. La microbiota oral, y en particular la presencia de ciertas especies se ha relacionado principalmente con la caries, una enfermedad infecciosa y transmisible que afecta a las estructuras dentarias. Los lactobacilos fueron las primeras bacterias relacionadas como agentes cariogénicos; no obstante, la bacteria más abundante en la boca es Streptococcus mutans. La caries es una enfermedad de origen multifactorial, uno de los factores que favorecen la caries dental es el consumo excesivo de azúcares.
Dentro de nuestra boca tenemos diversas partes, para nuestra sorpresa las bacterias que están sobre el diente son distintas a las que se encuentran en el paladar. Inclusive las bacterias de la saliva y los de la lengua son diferentes. Esta disparidad se debe a los pequeños cambios que hay en el pH (medida de la acidez o alcalinidad) y a la disponibilidad de nutrientes. Entre las bacterias de la boca existe competencia, pueden ayudarse entre ellas (agonistas) o combatirse (antagonistas). Para su mejor organización y convivencia conforman equipos en forma de tapetes, también conocidos como biopelículas. Las biopelículas se encuentran adheridas a las diversas regiones de la boca, convirtiéndose en una placa que si no se elimina se forma el sarro dental. Los tapetes microbianos tienen un lenguaje especial para poder comunicarse entre ellos, conocido como “quórum sensing”. Este lenguaje consiste en moléculas que ayudan a determinar la densidad poblacional de las diferentes biopelículas, así como, a la regulación de la expresión de los genes.
Se ha propuesta una hipótesis conocida como “placa ecológica” (Marsh PD, 1994) en la que se argumenta que la caries y la periodontitis se debe a una ruptura del equilibrio entre las diversas bacterias que coexisten en la boca, bacterias buenas y malas. Este desequilibrio puede ser ocasionado por un alto consumo de azúcares o carbohidratos. Las bacterias metabolizan los azúcares ocasionando un pH ácido. Este ambiente ácido causa la desmineralización de los dientes y su debilidad, y solo crecerán las bacterias resistentes. Tal es el caso de los Lactobacillus y Streptococcus, que afectan el esmalte dental. En cambio, los organismos que ayudan a mantener saludable al esmalte son sensibles a ambientes ácidos. ¿De qué manera podríamos ayudar a mantener el equilibrio en nuestra boca? Fácil, hay que seguir el consejo de los padres; cepillarse después de cada comida.
Pero eso no es todo, hay otros factores que pueden afectar a las comunidades bacterianas de la boca. Por ejemplo, se ha reportado que algunas especies de bacterias, asociadas a la periodontitis, son influenciadas por los niveles de hormonas sexuales. Fumar es otro factor que se ha investigado que favorece el desarrollo de bacterias cariogénicas, tal vez alterando la composición de la saliva y su efecto benéfico, no se sabe exactamente de qué forma la nicotina afecta a las bacterias buenas o comensales. El consumo de alcohol también altera la comunidad bacteriana y puede derivar en otras enfermedades de la boca, en cáncer de cabeza, cuello o del tracto digestivo. En un estudio con ratas bastó un 20% de alcohol en la dieta para incrementar la presencia de Streptococcus mutans, una de las bacterias causantes de las caries. En humanos el consumo de cerveza, vino o licor también se ha asociado a un aumento en las poblaciones de Streptococcus, Corynebacterium, Prevotella, Aggregatibacter y Eikenella. Por otro lado, se ha reportado que las mujeres embarazadas que padecen enfermedades periodontales tienen mayor riesgo de tener un parto prematuro o bebés de bajo peso. Un grupo de investigadores comparó la microbiota de personas obesas versus personas de peso normal (M Lu, 2019), ellos documentaron diferentes bacterias en la boca de las personas obesas. Sin embargo, falta determinar cuáles son los factores que están interviniendo en estas discrepancias.
En general, desconocemos el pequeño mundo que vive dentro de nosotros. Y es importante saber la forma en la que podemos conservar el equilibrio para mantenernos saludables.