Obispos que escuchan al pueblo
MIRAR.- El Papa Francisco nos está convocando a escuchar más al Pueblo de Dios, a los fieles católicos, también a los de otras religiones e incluso a los no creyentes, para descubrir qué nos dice Dios en sus voces, en sus anhelos, en sus dolores, en sus reclamos, y no ser una Iglesia piramidal que sólo enseña y condena.
Para ello, ha convocado al Sínodo de los Obispos sobre lo que implica la sinodalidad, que es caminar juntos, y sesionar en Roma en octubre de 2023 y octubre de 2024; pero pidió que antes se organizara una amplia consulta mundial. Ahora se nos convoca a seguir reflexionando en ello por Continentes. Es un lento y paciente proceso de escucha, al que debemos educarnos todos.
El Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) promovió una Asamblea Eclesial, para dialogar no sólo entre obispos, sino con todo el Pueblo de Dios, sobre las realidades sociales, económicas, políticas, culturales, ecológicas y eclesiales que vivimos en el subcontinente. En consultas virtuales, participaron casi 70 mil personas; pero en forma presencial, en México, del 21 al 28 de noviembre de 2021, estuvieron presentes sólo unas cien y otros mil en forma virtual. Seleccionamos 41 desafíos e hicimos varias propuestas pastorales para atenderlos como Iglesia; entre ellos, priorizamos 12.
A nivel nacional, nuestra Conferencia Episcopal hizo algo semejante, y con los resultados de la fase diocesana de consulta para el Sínodo Mundial y para la Primera Asamblea Eclesial del CELAM, organizó el Primer Encuentro Eclesial de México, en abril pasado, en que participaron virtualmente cientos de personas. Ya se nos entregó la Síntesis de la Consulta Diocesana, con las respuestas nacionales. En ellas, se resalta mucho que los obispos, junto con los sacerdotes y demás agentes pastorales, debemos escuchar mucho más al Pueblo de Dios y tomarlo más en cuenta, a la hora de las decisiones pastorales.
No se pierde la autoridad jerárquica, sino que se ejerce escuchando las inquietudes, las necesidades, los problemas y las propuestas de la comunidad eclesial, siempre iluminados por la Palabra de Dios y el Magisterio de la Iglesia.